Destituyen al ministro de Cultura pero nombran a una sucesora que le supera en animadversión contra todo lo relacionado con el intercambio de archivos. Recordad su nombre porque esta nueva singladura promete futuros titulares en neón parpadeante. Algunos piensan que este es el primer día del fin de Internet tal y como lo conocemos.
En principio, de destitución de Cesar Molina como ministro de Cultura hacía presagiar un cambio de filosofía en las directrices del gobierno. Sin embargo, nada más conocer el nombre de la sucesora, se ha derrumbado toda posibilidad de emprender un camino de futuro y modernidad en el tema de la Red. Tanto se notan las fobias de la nueva ministra que se está dando el primer caso en la historia donde la gente pide la dimisión de un cargo antes incluso de haber sido nombrado. Ya han aparecido grupos en Facebook y en Twitter pidiendo la dimisión inmediata de la ministra en ciernes. Antes encontrábamos oposición en el grupo “Molina pírate”, que contaba con unos 900 miembros. Ahora se ha convertido en “Sinde pírate” y ya va por los 700 (recordemos que aún no es ministra). Las frases que encabezan el grupo no puede ser más elocuentes: “Aún no has jurado el cargo como ministra pero nosotros ya te la tenemos jurada. Dispuesta a darle la puntilla al P2P en España. O tú o nosotros”. Impresiona ver la velocidad con que se organizan los usuarios y se movilizan en conciencia para evitar la catástrofe que se avecina en el país. Como toda mala noticia, se extiende a la velocidad del rayo entre la comunidad digital y las voces de alarma social ya resuenan en cada rincón de Internet. Pero ¿Quién es la temida señora que pretende devolver a España a la Edad Media?
Se llama Ángeles González-Sinde, nació en Madrid en 1965 y estudió Filología Clásica en la Universidad Complutense de Madrid. Guionista profesional, he dejado su sello en multitud de series de televisión y bastantes películas, algunas incluso ganadoras de premios Goya. Presidenta de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España (AACCE), famosa por su declarada animadversión contra todo lo que implique intercambio de archivos. Por afinidad ideológica en cuanto al tema que nos refiere, podría ser hermana gemela de Teddy Bautista, pues sus comentarios son como gotas de agua con respecto a los que suele realizar el presidente de la SGAE. Tras esos ojos dulces y melifluos, se esconde una auténtica enemiga del desarrollo digital. No oculta ni su rabia contra Internet ni sus aviesas intenciones de llevar a cabo acciones civiles tan cruentas como la ley de los 3 avisos o cualquier otra que lesione gravemente los derechos de los internautas a favor de la “cultura”, como dice ella. Pero veamos algunas perlas del pensamiento “gonzalez-sindero” para que cada uno comprenda el alcance de este nombramiento tan peligroso. Estas son las cosas que opina la futura ministra:
- “¿Para qué necesitamos ADSL a no sé cuántos gigas? ¿Para mandar e-mails? Telefónica sabe que el 80% del volumen de tráfico en sus líneas es descarga de archivos”
- “Existe una falsa idea progresista de que la cultura debe ser gratis. Y los antibióticos ¿no?”
- "Hay que seguir peleando para que las descargas ilegales no hagan desaparecer a la industria del cine y para que nuestros administradores comprendan que en el negocio de la Red no pueden ganar sólo las operadoras de ADSL, mientras quienes proporcionamos los contenidos, perdemos".
- Al ministro de Ministro de Industria: “Su misión es hacer caso a lo que le dicen los "autores" y no los consumidores”
- “El canon son sólo unos céntimos y no compensa la piratería”
Desde la primera frase, la futura ministra exhibe ya un desconocimiento supino de tecnología, de informática básica o incluso de lo que representa la nueva era. Clara manifestación de intenciones y clara postura en contra del intercambio de archivos y lo que significa para la sociedad del siglo 21. González-Sinde puede considerarse una analfabeta digital con pocas ganas de aprender su futura profesión y embarcada en un radicalismo ideológico que va a marcar unas pautas decididamente retrógradas en el desarrollo de la sociedad de la información. Igual que no se le ofrece un puesto de Mnistro de Defensa a un militar, no se entiende cómo pueden elegir para el cargo de cultura a una persona tan descaradamente afín a las tesis de la SGAE. Con el enorme poder que ostentará en cuanto jure el cargo, todos esos sueños de represión digital van a poder ser realizados sin ningún tipo de debate ni oportunidad para los miles de ciudadanos que no están de acuerdo con su postura. Llevar a cabo este nombramiento será tan paradójico como poner a Bill Gates de Ministro para la Defensa del Software Libre o colocar a un talibán como Ministro de Igualdad de la Mujer. Lo que parece inevitable es que el rostro de esta mujer se va a convertir en uno de los más odiados de todo Internet.
Se avecinan tiempos muy oscuros. Probablemente esto sea el inicio de una de las peores épocas de la joven historia de Internet en España. Nuestro país nunca se ha distinguido por su talante innovador y tecnológico. De hecho, viajamos en el vagón de cola europeo con respecto a todo lo referido a la Red. Tenemos las conexiones más lentas y las más caras. Nuestro analfabetismo digital alcanza cotas que asombran al resto del continente. Pero conociendo la catadura intelectual de personas que van a tener el poder de dirigir un país entero dentro del ámbito cultural no nos extraña. En España, los dirigentes siguen sin darse cuenta del enorme futuro que posee Internet y el intercambio de archivos para el desarrollo de la sociedad de la información. Porque en realidad, es el motor del futuro.