En el Instituto Federal de Tecnología en Zurich, los estudiantes están desarrollando un tipo de cuadricóptero que puede sincronizar su vuelo con otras aeronaves gemelas, recarga sus baterías con sólo apoyar su estructura sobre una plataforma diseñada de manera especial para cumplir esta función, y dar giros de 360 grados en pleno vuelo. Pero si todo esto te parece poco, además es capaz de tocar villancicos navideños en el piano. No te pierdas los videos de este asombroso desarrollo.
Pensar que un cuadricóptero pueda sustentarse al menos de manera suave y estable en el aire, para nosotros sería completar una parte muy importante de un emprendimiento de esta naturaleza. Los estudiantes del Instituto Federal de Tecnología en Zurich aspiran a mucho más y lo demuestran en los sorprendentes videos que se encuentran en la Web. El proyecto Flying Maching Arena se desarrolla dentro de un espacio cerrado de 10 metros cúbicos, con el piso totalmente cubierto de espuma de poliuretano (gomaespuma) para evitar daños importantes durante eventuales caídas y con paredes realizadas de tejido plástico para evitar golpes y mantener el área cerrada. Todo este volumen útil de espacio de trabajo es monitoreado por cámaras que se encargan de seguir el movimiento de estas naves proporcionando a los desarrolladores una verdadera y exacta réplica de los movimientos realizados en el aire por los aparatos. Esta información les proporciona datos muy valiosos sobre la precisión de los movimientos ejecutados y ayuda a mejorar el software que organiza y ordena el vuelo de cada nave. Así es el lugar, así es el trabajo, disfrútalo:
Como te mencionamos al comienzo y como pudiste ver en el video, la plataforma de aterrizaje de cada aparato sirve como base de recarga de sus baterías sin necesidad de intervención humana para que esta tarea pueda llevarse a cabo. Estos pequeños robots voladores ofrecen ventajas muy interesantes para realizar trabajos en diferentes áreas gracias a su vuelo de alta precisión, a su sistema de enlace de radio de gran desempeño y a un software que es muy fácil de utilizar para crear rutinas de vuelo sincronizadas. Además, el diseño está optimizado para permitir al equipo restablecer de manera muy rápida el equilibrio de vuelo ante un golpe de un objeto extraño o el choque accidental contra alguna pared o techo. Lo que no deja de sorprender es la capacidad que poseen de reaccionar ante el entorno que los rodea y sus variantes, por ejemplo, la música. Observa cómo son capaces de “bailar” en pleno vuelo al compás de los sonidos ambientes.
Lamentablemente no hay demasiada información sobre ciertos aspectos técnicos de la construcción, pero por lo que se puede apreciar en los videos, tienen la capacidad de operar mediante el mando de un controlador a distancia o de manera autónoma siguiendo un patrón definido de trabajo. Dentro de la belleza y la admiración que despiertan este tipo de robots, no deja de sorprendernos que sea capaz de escuchar las instrucciones de parte de una persona y ejecutarlas a la perfección. Además, muestra una clara capacidad cognitiva con las tareas que realiza y que luego utiliza para completar su trabajo. Una prueba muy elocuente de esto es este último video donde nos muestra cómo aprende a escuchar las notas musicales y, en función de ello, nos saluda con una melodía alegórica a estas fiestas de fin de año. Observa al final del video que lograr este trabajo no es una tarea sencilla. Por supuesto, nos sumamos al saludo: ¡Felicidades!