Comprar ropa en línea es un riesgo. Aunque el diseño puede ser perfecto, nunca sabes exactamente cómo te va a quedar la prenda, aunque sea del mismo talle que la que llevas en el momento. Fits.me es una iniciativa proveniente de Estonia que podría cambiar para siempre la manera en que se vende ropa en línea, ya que le ofrece a las tiendas un robot capaz de imitar cerca de 2.000 formas del cuerpo de un hombre y mostrar cómo quedan los distintos talles de una prenda en un tipo cuerpo específico.
Personalmente, odio ir a comprar ropa. Y sé que hay muchos por aquí que comparten el sentimiento. Aunque es un mal necesario, el hecho de tener que quitarse y ponerse prendas, una tras otra, solo para ver si no queda ridícula o que los botones no salen disparados por la presión, es un ejercicio exasperante. Afortunadamente, la tecnología está de nuestro lado y existe un interesante robot que se prueba la ropa por nosotros a la hora de comprar ropa en línea. Esto quiere decir que uno de los problemas por los que solo el 8% de la ropa se vende vía Internet podría estar solucionado.
El sitio Fits.me es una iniciativa de Estonia, donde crearon un robot capaz de probarse ropa. Aunque el sitio no vende ropa en sí, ofrecen su invención a sitios que sí lo hacen, para que los clientes puedan ver cómo le quedaría dicha prenda. Y para lograrlo, el robot es capaz de imitar más de 2,000 formas del cuerpo de un hombre. Actualmente puedes probar el robot desde el sitio y experimentar cómo sería la experiencia de comprar ropa en línea. Una vez que hayas presionado “Try it Out”, debes ingresas tus datos físicos en el sistema, desde tu altura, hasta el tamaño de tu cuello, pecho, cintura y muñeca. En el siguiente paso debes confirmar las medidas mientras ves cómo el robot toma la forma de tu cuerpo. Finalmente, puedes probar distintos talles y ver cómo te quedaría la prenda.
Desde su lanzamiento en junio, Fits.me ha mostrado un efecto increíble. Por ejemplo, en una prueba alemana, mostró un crecimiento del 300% en la venta de ropa en línea. En caso de que una tienda contrate los servicios de Fits.me, lo primero que hacen es enviar su ropa, para que tomen fotografías del robot con las distintas prendas. El robot cambia de forma constantemente, mientras una cámara toma cada una de las imágenes. Luego, son guardadas en la base de datos y son utilizadas para mostrarles a los clientes cómo le quedarían los distintos talles de una prenda en particular.
Esto definitivamente cambiará la compra de ropa en línea para siempre, ya que hasta el momento no había sido un mercado muy explorado debido a este tipo de limitaciones. Y Fits.me ya se encuentra en negocio con muchas tiendas de ropa de alrededor del mundo, de modo que podremos ver el sistema implementándose en muchos sitios. Es cierto que por el momento solo tienen un maniquí con forma de hombre, pero estarán presentando la versión femenina en noviembre de este año, lo que extenderá aún más la utilidad del sistema.
