Router aquí, router allá, cambios de lugar, modificaciones en la configuración… tarde o temprano llegamos a un punto en el que los recursos normales se agotan, y ese condenado rincón de la casa sigue sin tener señal WiFi. Lo primero que viene al rescate en estos casos es el clásico extensor WiFi, que si bien carga con algunos límites naturales, debería ser más que suficiente para incrementar el alcance de la señal. Hoy presentamos a cinco de ellos.
Obtener una buena señal WiFi de un router no debería ser complicado… pero hay veces en las que simplemente lo es. Los fabricantes sólo pueden anticipar hasta cierto punto las limitaciones con las que el router deberá lidiar en un hogar, y eso incluye a su construcción. Algunos materiales son más tolerantes con las señales WiFi, mientras que otros no muestran piedad alguna. Después hay cuestiones más simples, como las dimensiones. Si la propiedad es demasiado larga o ancha, un router ubicado en uno de los extremos tendrá un trabajo bastante difícil por delante si la idea es que cubra toda la superficie. Aún así, los routers cuentan con un poderoso aliado en la forma de extensores WiFi, también llamados repetidores. Muchos usuarios prefieren utilizar dispositivos que aprovechan la instalación eléctrica para extender una señal Ethernet, pero nuestro objetivo en esta ocasión es mantener todo bajo un perfil inalámbrico. Si estás buscando un extensor WiFi, aquí tienes cinco sugerencias:
TP-LINK TL-WA854RE
Uno de los más vendidos en línea gracias a su precio, el TP-LINK TL-WA854RE asume de maravillas su rol como extensor WiFi introductorio. Posee dos antenas internas, trabaja con los protocolos b, g, y n, y aunque está limitado a 2.4 GHz, su velocidad máxima alcanza los 300 megabits por segundo, dependiendo de la conexión original. Es muy compacto, y pasa bastante desapercibido. (19 euros)
D-Link DAP-1320/B
Si por algún motivo el hardware de TP-LINK no te agrada, una opción muy similar en cuanto a precio y especificaciones es el repetidor D-Link DAP-1320/B. Es aún más compacto que la oferta de TP-LINK (siempre hay que considerar a la estética), se configura en menos de cinco minutos, e incluye soporte WPS para hacer el proceso más simple (aunque no recomiendo el uso de WPS en ningún caso). (26 euros)
Netgear WN3000RP-200PES
Hagamos lugar para otra alternativa competitiva, esta vez de parte de Netgear. El modelo WN3000RP-200PES (nombre complicado si los hay) presenta una ventaja muy importante al contar con antenas externas direccionales. Esto afecta un poco su apariencia, pero quien desee un poco más de precisión a la hora de dirigir la señal, debería tenerlo en cuenta. (24 euros)
Belkin F9K1015AZ
Llega el turno de Belkin con su repetidor WiFi F9K1015AZ. El fabricante apuesta a un diseño compacto, casi camuflado en la toma de tensión, y aún así reporta que este pequeño dispositivo puede cubrir más de 400 metros cuadrados adicionales por su cuenta. Si necesitas extender la banda de 2.4 GHz y mantener cierta «uniformidad» en tu tomacorriente, este extensor debería ayudar. (24 euros)
Linksys RE4100W-EU
Finalmente, vamos a duplicar el presupuesto con el Linksys RE4100W-EU. El punto principal para destacar es que se trata de un repetidor dual-band, o sea que trabaja tanto en 2.4 como en 5 GHz, algo crítico si el objetivo es extender la señal «y» evitar interferencias de otras redes. También cuenta con un puerto Ethernet, de modo tal que puede funcionar como punto de acceso para un sistema de escritorio. (45 euros)
Como podrás observar, la mayoría de los ítems en esta lista se concentran en extender redes de 2.4 GHz, con una única opción en 5 GHz. Decidí hacer esto porque los extensores WiFi pueden salirse de presupuesto rápidamente (150 euros o más), y cualquiera que sea tu adquisición final, lo lógico es partir de una buena relación precio-rendimiento. Para cerrar, no olvides que existe la posibilidad de reutilizar un viejo router como repetidor, aunque eso ya depende de su hardware, y las opciones en el firmware. ¡Buena suerte!
