Ha terminado una de las series más vistas de los últimos tiempos. Posiblemente “Caprica” nos ofrezca un placebo, pero muchos extrañaremos las batallas y conflictos de Battlestar Galactica. El capitulo doble final, que recomendamos ver antes de seguir leyendo, cierra la cuarta y ultima temporada con la mención de la Eva Mitocondrial que, para la ciencia, es la madre de todos nosotros. ¿Corre sangre Cylon por nuestras venas?
Tal como muchos fanáticos preveían, el último capítulo de una de las series más vistas de los últimos años incluyó partes iguales de acción y emoción. Todos sentimos una sensación rara en el estomago cuando Sam, convertido en una especie de “piloto automático viviente” de la querida Galactica, conduce toda la flota en un último vuelo hacia el Sol. Las escenas del ataque final a la base Cylon para recuperar a Hera, en la que la Galactica termina prácticamente destrozada por el fuego enemigo, quedarán en el recuerdo. Más extrañaremos la batalla entre los modelos viejos y nuevos de centuriones Cylon que se dan una buena paliza entre sí, en un derroche de efectos visuales.
A pesar de todo, la batalla final tuvo menos héroes muertos de los que uno podría imaginarse. De hecho, casi todos los personajes principales salen vivos de este capítulo. Algo que nos tomó por sorpresa fue el asesinato de Tori, cuando el Jefe cuando se entera, sesión cuasi espiritista de por medio, que había matado Cally nosecuantos capítulos antes. Luego vendría la hora del último salto para Galactica, a las inmediaciones de un planeta idéntico a la Tierra que tanto tiempo buscaron. La flota a pleno de reúne, y los protagonistas (humanos y cylons de la mano) aterrizan en una réplica de la sabana africana.
Como era previsible, los guionistas no echaron mano de ningún milagro (de los tradicionales o de los tecnológicos) para salvar la vida de Roslin, así que muere al lado de Adama, que luego de viajar a lo largo y a lo ancho del universo se construye una cabaña para ver todos los amaneceres que pueda antes morir. Los miles de supervivientes de las 12 Colonias se encuentran ahora en la era prehistórica de nuestro planeta, y hasta se pueden ver los primeros habitantes de África caminado por allí. Luego de liberar a los centuriones para que puedan hacer de sus artificiales vidas lo que quieran, se nos sugiere que Hera podría ser la verdadera Eva mitocondrial y que todo el ciclo que observamos durante cuatro años podría volver a repetirse. Todo esto narrado con “All Along the Watchtower” de Jimmy Hendrix sonando de fondo.
Pero, ¿qué es eso de la Eva Mitocondrial? Las mitocondrias son orgánulos, presentes en prácticamente todas las células eucariotas (sí, en las humanas también), encargados de suministrar la gran parte de la energía necesaria para desarrollar la actividad celular. Simplificando mucho, se puede decir que son las “baterías” de las células. Realizan, además, muchas otras funciones, como la síntesis de algunos coenzimas. La científica estadounidense Lynn Margulis postuló, en los años 80s, que hace unos 1.500 millones de años una célula procariota se fusionó en con otra célula procariota o eucariota primitiva al ser fagocitada sin ser inmediatamente digerida, un fenómeno observado con frecuencia. Allí se produjo una simbiosis permanente entre ambos tipos de seres, en la que la célula procariota proporcionaba energía y la célula hospedadora ofrecía un medio estable y rico en nutrientes a la otra. La maquinaria evolutiva hizo el resto, y hoy día las mitocondrias se encuentran en casi todas las células.
Según la teoría genetista, la Eva mitocondrial habría sido una mujer africana que sería el ancestro femenino de todos nosotros. Esta mujer tendría las mitocondrias de las cuales descienden todas las mitocondrias de la población humana actual. Es posible, al seguir línea genealógica por vía materna de cada persona en el árbol genealógico de toda la humanidad, llegar a un “tronco” en el que se encuentra esta Eva mitocondrial, que es (ni mas ni menos) que el antepasado femenino común del cual desciende toda la población actual de Homo sapiens. Basándose en datos proporcionados por la ingeniería genética, los investigadores han determinado que esta Eva vivió aproximadamente hace 150.000 años, en algún lugar de África. Oh sorpresa, la misma época y el mismo lugar en el que Hera se encuentra al finalizar Battlestar Galactica.
Más allá de haber sido un excelente pasatiempo durante cuatro años, uno de los motivos por los que seguramente Battlestar Galactica se convierta –otra vez- en una serie de culto es la importancia que los guionistas han dado al mensaje subyacente sobre la naturaleza humana. No solo hemos visto batallas llenas de rayos y chispas, en la que más de cuatro Cylons perdieron sus tornillos. La serie ha logrado incorporar temas como el liderazgo, el terrorismo o la traición. Nos han quedado muchas dudas. ¿Que era realmente Starbuck? ¿Quién era Daniel, el Cylon numero siete? ¿Era el padre de Starbuck? Es muy posible que la anunciada película BattleStar Galactica: The Plan que se emitirá en junio, o la nueva serie Caprica develen algunos de estos misterios. Como sea, esperamos poder disfrutar nuevamente de este universo increíble en el que se desarrolló BattleStar Galactica. Eso sí, esperemos que esta vez no haya tantos “milagros” en el medio.