Si hay algo que tienen en común la gran cantidad de programas que hay disponibles (y también sistemas operativos), es el Contrato de Licencia de Usuario Final, "CLUF" o "EULA" en sus siglas en inglés. Algunos son más largos que otros, pero a menos que seamos unos verdaderos entendidos en leyes, tantas líneas de texto terminan por agobiar al usuario, y presiona "Aceptar" sin mayores problemas. Pero si en realidad te interesa saber qué dicen estos contratos, y deseas obtener un resumen de las secciones más importantes o conflictivas, entonces esta utilidad puede servirte.
EULAyzer analiza el contenido de estos contratos a través de la búsqueda de palabras clave que son consideradas problemáticas o que necesitan un grado especial de atención. Estos contratos suelen ser tan largos que la gran mayoría de los usuarios ni siquiera se molesta en leerlos, pero ya hemos conocido algunos ejemplos de las consecuencias que puede haber al no hacerlo. De manera muy florida y elaborada, un desarrollador puede declarar en el contrato que no se hará responsable si su programa hace volar por los aires a nuestro ordenador, como también puede mencionar detalles sobre la instalación de "software adicional", que en muchos casos termina siendo spyware.
EULAyzer tiene una versión Pro, pero nuestras pruebas con la versión gratuita han revelado que funciona muy bien. Entre las palabras y frases que EULAyzer destaca hay ejemplos como "terceros" o "publicidad", pero los resultados varían según la longitud del EULA y lo bien redactado que esté. Al final del análisis, el programa le reporta al usuario el potencial nivel de gravedad que ese EULA puede llegar a tener. Por ejemplo, al estudiar el EULA del mismo EULAyzer vimos que era bastante inocuo, pero tenía algún que otro detalle presente. Por ejemplo: Aquel que acepta la licencia puede recurrir a un tercero para que lo asista en la instalación del programa, siempre y cuando lo haga de la manera planeada, o sea, sin modificar el instalador o descomprimirlo, y sin cobrar un centavo por ello.
El único problema de EULAyzer es que sólo funciona con contratos que estén en inglés, pero para aquellos que tengan dificultades con ese idioma, es mucho más fácil traducir unos pocos párrafos que traducir el contrato por completo. Aún hay muchas cosas que siguen siendo complicadas en la informática, y los contratos-licencia están casi al tope de la lista. Es lógico que los desarrolladores traten de protegerse si las cosas salen mal, pero algunos contratos son tan complejos que casi hay que aprender otro idioma para entenderlos. Por suerte, EULAyzer hace las cosas un poco más sencillas.