Los Reyes de España inauguraron lo que será uno de los mayores telescopios ópticos de la Tierra y que estará situado en un emplazamiento privilegiado de las Islas Canarias. Con semejante poderío este aparato podrá estudiar a fondo los misterios del universo más profundo y encontrar respuestas a preguntas que hoy pertenecen a la ciencia ficción. Damos la bienvenida al Gran Telescopio Canarias (GTC).
El Gran Telescopio Canarias (GTC) posee un enorme espejo de 10,4 metros de diámetro y eso le proporciona el segundo puesto en el ranking mundial por detrás del Gran Telescopio Sudafricano con 11 metros de diámetro, pero por delante de los famosos Keck americanos emplazados en Hawai (que tantas satisfacciones están dando a la astronomía) y que cuentan con unos espejos de 10 metros de diámetro. Está instalado en el Observatorio del Roque de los Muchachos (ORM), en la isla canaria de La Palma, a 2.396 metros de altitud y sobre una superficie de 5.000 metros cuadrados. El CGT dispone de un espectacular espejo primario, segmentado en 36 piezas hexagonales de 470 kilos de peso cada uno y un total de 18 toneladas. Este espejo, cuya capacidad de visión equivale a cuatro millones de pupilas humanas, es la pieza clave del telescopio y ha sido fabricado por la empresa alemana Schott, con un bajo coeficiente de expansión térmica para garantizar la calidad de la visión.
El sistema óptico del CGT se completa con dos espejos (secundario y terciario) que forman imagen en siete estaciones focales; está dotado de equipos para recoger datos, como espectógrafo y cámara de alta eficiencia en el intervalo óptico, cámara de rango visible Osiris y espectógrafo en el infrarrojo térmico, espectógrafo multiobjeto para trabajar en el infrarrojo o un espectógrafo de baja resolución. Los sistemas infrarrojos han sido bautizados como Canaricam, Emir y Frida. El CGT dispone asimismo de una cúpula para evitar las turbulencias externas e internas que puedan degradar la imagen. Más de 1.000 personas y cien empresas han levantado y construido este artilugio de casi 500 toneladas que se podrían mover sólo con una mano, gracias a un novedoso sistema hidráulico alimentado por 2.700 litros de aceite.
Con un coste aproximado de 160 millones de euros, el promotor del GTC es el Instituto Astrofísico de Canarias (IAC) y de su construcción se encarga la empresa pública Grantecan S.A y en la que participan, como socios, la Comunidad Autónoma de Canarias y la Administración General del Estado. También intervienen en la construcción del telescopio el Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (IA-UNAM), el Instituto de Astrofísica, Óptica y Elctrónica de Puebla (México) y la Universidad de Florida (EE.UU.)
La impresionante construcción no quedará aquí pues el gobierno de España pretende construir en un futuro el telescopio más bestia de todo el planeta, con un espejo de 40 metros que pulverizará los 30 metros que ya han anunciado los americanos que van a instalar en el Hemisferio Norte. El país esta lanzado y su compromiso con la ciencia parece que se mantiene firme. Gracias a la construcción del GTC (la mayor infraestructura científica del país) España se posiciona como la novena potencia científica mundial y la octava en astronomía, ahí es nada. Y todo este derroche de tecnología astronómica permitirá profundizar en la búsqueda de planetas extrasolares, la medición de la energía oscura, galaxias activas con agujero negro y estudios sobre la intensidad del fondo cósmico de microondas, cuestiones de vital importancia que ayudarán a responder a las preguntas fundamentales de la existencia.