La semana pasada, el vídeo de una mujer ciega viendo a su bebé por primera vez alcanzó estatus viral. Además de ser una noticia extraordinaria, también nos recuerda el gran avance de la tecnología en materia de implantes ópticos y sistemas externos de asistencia. En esta ocasión, el responsable es eSight, un par de gafas electrónicas que combinan pantallas integradas, una cámara, y un mecanismo de calibración controlado por el usuario.
Con un promedio de ocho horas diarias frente a la pantalla de un ordenador debo decir que soy un verdadero privilegiado en lo que se refiere a mis ojos (el resto de mi cuerpo, es otra historia). Lamentablemente, hay muchas personas que no han tenido la misma suerte. Dependiendo de cada país, la definición de ser “legalmente ciego” puede registrar algunas variantes, pero en el fondo la situación es la misma. Perder capacidad visual a un punto tal que los métodos tradicionales de corrección no funcionan representa un desafío enorme para la medicina moderna. Sin embargo, la tecnología es una buena aliada. Hace poco hablamos sobre Be My Eyes, un servicio que permite prestar nuestros ojos a quienes lo necesiten, y también hay aplicaciones como TapTapSee que reconocen objetos, pero en esta oportunidad, tenemos una alternativa basada en hardware que ha explotado a través de la Web.
El sistema de gafas electrónicas eSight saltó a la fama después de que Kathy Beitz lo usara para ver a su hijo recién nacido por primera vez. A pesar de sus limitaciones, Kathy logró formar una familia y seguir una carrera, pero el nacimiento de su bebé lo cambió todo, y las gafas estuvieron a la altura. El objetivo de eSight es optimizar drásticamente las imágenes que llegan a los ojos, incrementando la cantidad de datos y elevando los niveles de reacción. El sistema se divide en un headset equipado con dos pantallas OLED y una cámara de alta definición, un marco especial, y la unidad de procesamiento que incluye todos los controles. ¿Qué es lo que puede ajustar el usuario? El nivel de zoom (hasta 14x), contraste, brillo, captura de cuadros y enfoque. Como si eso fuera poco, también existe la opción de conectar las gafas directamente a un televisor, y recibir imágenes aún más claras.
Imagino que se deben estar preguntando el precio. Cada unidad eSight cuesta 15 mil dólares, por lo que sus propios desarrolladores admiten el alto costo. Aún así, mantienen una campaña de donaciones para asistir a aquellos que no pueden comprarlas, algo como una especie de crowdfunding constante. Cada vez que se alcanzan 15 mil dólares en donaciones, automáticamente se entrega un eSight. La cobertura de la prensa ha sido amplia, pero lo que más importa aquí son los testimonios de los usuarios, y todos coinciden en que eSight funciona. Espero que las próximas versiones permitan reducciones en el costo y alcancen a más gente.