Lisandro Pardo
Los juegos de realidad alternativa o ARG han cambiado para siempre la forma de promocionar productos y mantener atrapada a la audiencia. Enlaces extraños, mensajes en espacios públicos, llamadas telefónicas, faxes, datos ocultos en canciones… todo vale para llevar a los participantes de un rompecabezas al siguiente, bajo la promesa de una gran recompensa. En el caso de la banda Gunship, se trata de nada menos que una máquina recreativa, pero quienes la deseen deberán sudar sangre para resolver los desafíos.
Si recorremos la historia de los juegos de realidad alternativa, descubriremos algunos ejemplos de muy alto perfil que tomaron por asalto al mundo entero. En lo personal recuerdo a I Love Bees, que sirvió como campaña promocional para Halo 2, Potato Sack del Portal 2, y en el caso de cine y libros vienen a la mente proyectos como The Game con Michael Douglas y Sean Penn, toda la saga Cloverfield, Parker Pyne Investiga de Agatha Christie, y por supuesto Ready Player One, cuya adaptación está a punto de llegar a los cines. Y hablando de Ready Player One, bueno… digamos que necesito compartir este vídeo:
«Art3mis & Parzival» pertenece a la banda Gunship, y desde cierto punto de vista, el vídeo sirve como spoiler de Ready Player One, pero hay algo más entre la historia de los personajes y el excelente pixel art: Pequeñas pistas que son fundamentales para el juego de realidad alternativa que está organizando Gunship, cuyo premio mayor es una máquina recreativa. El primer paso es compartir un correo electrónico, en el que recibiremos una contraseña para superar la primera prueba de la aventura de texto (sí, texto puro y duro, sin gráficos). El resto de las contraseñas están escondidas en el vídeo, o la playlist que preparó Gunship en Spotify.
Calculo que nuestros lectores podrán encontrar las primeras contraseñas sin mayores inconvenientes… pero la última es una historia aparte. La página oficial no tiene ninguna fecha límite, sin embargo, imagino que ya debe haber varios participantes «al otro lado de la puerta», esperando por el sorteo. ¿Qué esperas? Estoy seguro de que no vas a parar hasta que lo resuelvas.
