Seguramente tu velocidad de escritura en el ordenador no es demasiado elevada. Lo curioso del caso es que en realidad casi nadie escribe a la máxima velocidad posible, debido a que el diseño de los teclados está cuidadosamente estudiado para que esto sea así. Sin embargo, desde hace más de 80 años existe una solución a este problema: el teclado Dvorak
Por increíble que parezca, la disposición de las teclas en el teclado de tu ordenador (¡y de todos los demás, claro!) se ha hecho de forma tal que escribir, al menos en ingles, sea lo mas difícil posible. Y en realidad, existe (o existía) una muy buena razón para ello.
Los teclados “QWERTY“, llamados así por la disposición de las primeras seis teclas de la fila alfabética superior, tienen esa curiosa distribución desde la época de las primeras máquinas de escribir mecánicas. Este diseño fue patentado por Christopher Sholes en 1868 y vendido en 1973 a la famosa empresa Remington, e intentaba resolver un problema mecánico derivado del sistema interno de estas máquinas.
Si miras con atención lo que ocurre al presionar una tecla en una máquina de escribir mecánica, verás que una varilla de metal con el carácter estampado en su extremo superior, sube a gran velocidad desde el interior de la máquina para impactar sobre la cinta entintada y el papel. Esta acción es la que dibuja el carácter en cuestión sobre el papel. Luego, la varilla vuelve a su posición original.
Si intentas presionar dos teclas a la vez, es muy posible que las varillas lleguen al cilindro al mismo tiempo y se traben entre sí. Justamente esto es lo que les ocurría a los dactilógrafos más rápidos, y por eso Sholes se dedicó a complicar todo lo que pudo el teclado para que los oficinistas fuesen lo más lentos posibles al escribir.
Hoy día, con miles de millones de teclados instalados en los ordenadores de todo el mundo, la disposición QWERTY es sin duda la más usada, a pesar de no existir ningún motivo práctico para que sigamos siendo lentos a la hora de escribir ya que, como habrás notado, tu teclado no tiene ninguna varilla que se trabe por más que aprietes 10 teclas a la vez.
El teclado Dvorak
Muchas personas realizaron diseños de teclados más eficientes. El más conocido de todo es el que propusieron los doctores August Dvorak y William Dealey en los años 20 y 30. Conocido simplemente como “teclado Dvorak“, fue pensado teniendo en cuenta la frecuencia con la que aparece cada letra en el idioma inglés y la fisiología de la mano. Los mismos parámetros que tuvo en cuenta Sholes, pero con el fin opuesto.
El teclado Dvorak resulta más fácil de usar, ya que la mayoría de las palabras se escriben utilizando dedos de las dos manos. Se sabe que para lograr la máxima velocidad de tipeo, las letras más comunes deberían estar en la fila intermedia (donde descansan los dedos) y las mas “raras” en la fila inferior, que es la que más cuesta alcanzar. Dvorak lo tuvo en cuenta al distribuir las letras sobre el teclado. Ademas, aún a costa de ponerse en contra a unos cuantos, puso del lado derecho las letras que se emplean con más frecuencia, ya que la mayoría de las personas son diestras.
Y no se detuvo aquí. También pensó que era más fácil escribir las palabras si estas comenzaban en el exterior del teclado y se escribían hacia el centro, ya que fisiológicamente la mano es más eficiente operando de esa manera. Puedes hacer la prueba de golpeando sobre la mesa desde el meñique hasta el índice y viceversa, para ver que Dvorak tenía razón.
Dvorak terminó su diseño en 1932 y obtuvo por él la patente correspondiente en 1936. En 1982 fue reconocido como una alternativa a la distribución QWERTY por el American National Standards Institute (ANSI). Sin embargo, y a pesar de todo esto, se calcula que solo unos 100.000 usuarios en el mundo emplean este teclado.
Las causas de su baja aceptación son fáciles de ver: resulta muy difícil para un dactilógrafo reentrenarse para utilizar un teclado con las teclas en un lugar diferente. Durante la segunda guerra mundial el ejército de EE.UU. hizo pruebas con 15 personas entrenadas en el uso de un teclado Dvorak y las comparó con los resultados obtenidos por otras que empleaban teclados convencionales, y determino que las primeras eran hasta un 40% más veloces que las segundas. Sin embargo, este estudio suele ponerse en duda por que se realizaron bajo la supervisión de quien fuera el dueño de la patente en ese momento.
Hoy día puedes conseguir teclados con esta distribución para tu ordenador. O si quieres probarlo sin gastar una sola moneda, puedes utilizar este “Convertidor de QWERTY a Dvorak” para ver que tan rápido eres utilizándolo. Si te resulta, quizás al comprar tu próximo ordenador pidas un teclado Dvorak.