El medio rural también trata de modernizarse. Se presenta en sociedad el primer tractor de la historia que funciona con un motor de pila de combustible. Aunque su precio será muy alto y su rango de uso limitado, los dueños de la marca pretenden lanzarlo en el año 2013 con la esperanza de encontrar un nicho de mercado suficiente para este representante de la nueva era energética.
Hoy día el combustible dominante para la maquinaria pesada utilizada en el campo sigue siendo el gasoil, sin embargo, la marca New Holland NH2 quiere rivalizar con los coches eléctricos y con las motos “verdes” y ha presentado en Italia el prototipo del tractor de hidrogeno que lanzará al mercado en el año 2013. La máquina ha ganado dos premios (Oro y Plata) del SIMA 2009 en el apartado de innovación. En este prestigioso salón agrícola se dan cita la flor y nata de las marcas especializadas del mundo rural y el hecho de haber recibido estos premios dan buena muestra de la importancia de recibir los galardones. La medalla de Oro se las ha concedido por el motor de pila de hidrógeno y la de Plata por una avanzada transmisión (EasyDrive) que la marca ha presentado integrada en su tractor “verde”. New Holland apuesta por esta innovación porque considera que la tecnología del hidrógeno dará a los agricultores un suministro de energía que podría utilizarse en una amplia variedad de vehículos y aplicaciones, dándoles un mayor control sobre el futuro de su negocio.
Precisamente en una granja es donde se pueden aprovechar las ventajas de otras tecnologías de energías renovables como la eólica, la solar o la biomasa, que podrían generar electricidad suficiente para producir hidrógeno y alimentar así los tractores propuestos por la marca. El modelo NH2 se deriva del popular T6000, igualando su capacidad de carga y desplazamiento pero funcionando en completo silencio, sin emitir CO2 y sin cargar la atmósfera de humos tóxicos. Su poderoso motor de 106 CV permite al tractor subir por las cimas más escarpadas y trabajar a pleno rendimiento por muy dificultoso que se presente el terreno.
La transmisión EasyDrive que obtuvo la medalla de plata impresionó a los jueces por lo avanzado de su sistema y la manera que tiene de transmitir la energía procurada por la pila de combustible. Tiene una gama de velocidades de 0,3 km/h y 30 km/h, y se mueve continuamente y sin problemas desde la mínima a la máxima velocidad sin ningún tipo de cambios bruscos. Se usan sensores para medir el par, la velocidad del motor y variador de velocidad para controlar la transmisión por vía electrónica. Con este tipo de transmisión se optimiza la producción y el agricultor se beneficia de unos ratios de mejora sustanciales.
Parece que la moda de los motores de energía limpia llega hasta la agricultura. Este tractor ha dado el pistoletazo de salida para que el resto de los fabricantes se pongan las pilas (nunca mejor dicho) y comience la carrera por conseguir el mejor y más asequible vehículo de motor de hidrógeno.