No hay caso. El proyecto del CERN parece maldito desde el comienzo. En el tiempo que venimos cubriendo su progreso, es poco el progreso que hemos cubierto (valga el juego de palabras). Noticias no han faltado, pero pocas han sido buenas. A la avería sufrida la semana pasada, y al hackeo de la anterior, ahora hay que sumarle una conexión defectuosa entre dos de los magnetos. Esto causó un derretimiento (sí, se derritieron los magnetos) que terminó por decantar en un escape de helio en la zona. Y ahora hace frío, mucho frío.
No se puede decir que la crónica del Large Hadron Collider haya estado exenta de noticias. Por el contrario, no ha pasado semana que en NeoTeo no hayamos hablado del mismo. Por desgracia, todas han sido negativas. Histeria primero, amenazas de muerte después, hackeos y averías luego. Nada ha ido como planeado en lo que se considera el mayor y más importante experimento de todos los tiempos. Hoy las cosas no son diferentes, porque nos toca anunciar que el LHC será apagado por dos meses.
La razón es el derretimiento de dos magnetos del LHC, motivo de una conexión defectuosa. O, al menos, eso es lo que los científicos creen. Nuestro amigo James Gillies, vocero del Centro Europeo de Investigación Nuclear (CERN), dijo a CNN: “Es demasiado temprano para saber qué pasó. Pero parece ser que una conexión defectuosa entre dos magnetos paró la superconducción, logrando que se derritieran. Eso llevó a una falla técnica que hizo que el helio se escapara y afectara la zona.” O sea, oh oh.
El área donde se escapó el helio, como te imaginarás, esta muy muy muuuuuuy fría, por lo que debe ser calentada un poco para que los técnicos puedan entrar y arreglar el desperfecto. El problema es que subir la temperatura lleva semanas enteras (lo mismo que bajarla). Por ende, no habrá colisiones de partículas por al menos dos meses (siendo optimistas, porque como viene la cosa…)
Como es lógico, todos aseguran que estas cosas suceden, son normales, etc. Pero si uno navega un rato, podrá encontrar teorías de lo más graciosas. Como que esto es obra de dios, que el destino conspira contra el LHC porque nos destruirá a todos, que los extraterrestres están detrás de todo porque peligra la galaxia entera, etc. Elige la teoría conspirativa que más te guste, probablemente exista. Nosotros preferimos ir con la lógica y la razón por delante: ¡despidan a los malditos técnicos encargados del mantenimiento!
Esperemos que los japoneses no tengan tantos problemas con su Large Helical Device, porque sino esto ya es chiste.