El Cosmonauta: Primera película española de libre distribución

El futuro nos ha alcanzado de lleno con esta idea tan arriesgada como apasionante. Por primera vez tenemos en España la posibilidad de crear, producir y diseñar una película como dios manda. Y una vez realizada, la obra podrá ser editada, remezclada, copiada y compartida, según los mandamientos del derecho Creative Commons, ese gran desconocido que molesta tanto a la SGAE y otras entidades “culturales”. Por sólo 2 euros puedes ser productor y tu nombre aparecerá en los títulos de crédito ¡Lánzate al espacio!

Este fascinante proyecto, emprendido por tres estudiantes de Comunicación Audiovisual de 22 años (Bruno Teixidor, Carola Rodríguez y Nicolás Alcalá), va a revolucionar todo lo conocido en el mundo de las artes audiovisuales. Esta idea resulta innovadora tanto por su concepto de la propiedad intelectual como por su modelo de financiación. Los nombres de estos valientes quedarán para la historia, lo mismo que el tuyo si decides aportar 2 euros (te permiten hasta 200 euros) para producir la película puesto que aparecerán en los títulos de crédito y te otorgará derechos y ventajas, aparte de un bonito pack de bienvenida, cargado de regalos y de ilusiones. En el siguiente nivel encontramos otra figura fundamental para financiar la empresa: el inversor. Si quieres subir al último peldaño, necesitarás 1.000 euros para convertirte en socio capitalista, que en el fondo lo que hace es comprar un porcentaje de la película, por tanto, cuando haya beneficios le corresponde una parte de ellos. Si confías en este nuevo modelo de negocio audiovisual, basado en la libre distribución, sólo tienes que desembolsar dicha cantidad para que puedas cobrar en el futuro las ganancias obtenidas por la película.

Las únicas condiciones son que “acrediten la película como fuente original”, indicó Teixidor, uno de los fundadores de Riot Cinema Collective, la productora responsable del proyecto, "y que deben distribuir el material que creen de la misma manera" (con la misma versión de la licencia Creative Commons). Esto debe generarle una gran urticaria, tanto a las entidades de gestión de derechos de autor como al ministerio de “Cultura”. No podemos dejar pasar la ocasión de mostraros la divertidísima carta que ha enviado el inefable Carlos Almeida (el mejor abogado informático de España) a la ministra González-Sinde: lee aquí.

Pero ¿de donde vendrán los beneficios si la obra es gratuita? Pues básicamente de los productos de merchandising relacionados con la película y con la publicidad (que le pregunten a Google). Según palabras del propio Teixidor "La amortización de todo esto viene por valores añadidos y productos derivados, es decir, no por la película en sí sino por el merchandising, por la posibilidad de insertar publicidad en un producto muy visible". A los que piensen que esto va a ser un pufo, les informamos que 2 meses y medio de lanzar su campaña, Riot Cinema Collective tiene ya 2  inversores y casi 700 productores: "Nada más salir, la primera semana ya cubrimos todos los costes de salida", señaló Teixidor. Para comenzar el rodaje, el equipo no va a cobrar sus sueldos hasta alcanzar la codiciada cifra de 158.000 euros para terminar la película, o un total de 450.000 para pagar todos los sueldos. "Si todo va en el ritmo que va ahora, podríamos estar rodando en abril del año que viene, y tener la película terminada el año que viene", explicó Carola Rodríguez, la responsable de producción.

"No pensamos que se deba ni que se tenga que renunciar a la profesionalidad ni a los resultados profesionales por hacer cine independiente", afirmó Teixidor. "Si haces cine independiente dentro de tus posibilidades, no hace falta un gran presupuesto. Creemos que se puede hacer buen cine, barato", concluyó Rodríguez. La única pega será comprobar qué sucede si las aportaciones se paralizan y no consiguen llegar al mínimo exigido para rodar la película. No me refiero tanto al hecho de que tengan que devolver el dinero, sino al desánimo que provocará en los que creemos en el futuro de la libre distribución. Pero no seamos agoreros. Para llenarse de optimismo e ilusión recomendamos encarecidamente leer el magnífico dossier que la productora ha publicado para documentar el proyecto y hacerlo irresistible al gran público: Leer aquí.

¿Cómo será la película? El film está basada en la obra de Yago Ferreiro, Poética para cosmonautas, renacido al mundo literario como Henry Pierrot (autor de culto y alumno de Roland Barthes). La cosa promete, pues aparte de que los integrantes de Riot Cinema Collective poseen amplia experiencia en el campo audiovisual, se están esforzando por ilusionar al entorno y exprimir los recursos al límite para hacer de esta película una obra digna de admiración. Por lo pronto, ya han conseguido que Eduard Artemiev, el compositor de la banda sonora de "Solaris", les cediera el uso de la música de la cinta y les enviara una emotiva carta expresándoles su apoyo. Además, la diseñadora de vestuario de "Solaris", la cinta de 1972, les diseñará un vestido. Otro éxito de la empresa es que ya antes de rodar, han conseguido permiso para rodar en la Ciudad de las Estrellas, donde se preparan los cosmonautas rusos antes de sus viajes al espacio y transcurre parte de su historia de ciencia ficción. Si observamos la parte inferior de la página oficial del proyecto, vemos que han recibido el apoyo de ilustres entidades y organizaciones.

Cuentan con el apasionado impulso de Boris Volynov, Cosmonauta Retirado con Misiones Soyuz 5 y 20,  Sergey Volkov, Cosmonauta Ruso Expedición 17 ISS, J.L. Ruiz de Gopegui Ex-director de los programas NASA en España, LEEM Laboratorio para la Experimentación en Espacio y Microgravedad, Museo de Aeronáutica y Astronáutica de Cuatro Vientos, la embajada de la federación rusa en Madrid, incluso Bob McAndrew, uno de los guionistas de la Paramount y Twentieth Century Fox, que ha trabajado con actores de la talla de Liza Minelli, John Voight, Tom Selleck, Raul Julia o Christopher Walken, ha avalado el proyecto, del que asegura tendrá una gran audiencia en todo el mundo.

Me podéis llamar ingenuo, iluso, cándido incluso, pero a mí me encanta el proyecto. La atmósfera espacial la tienen muy conseguida y te introducen en un ambiente futurista de una manera muy eficaz. Los anagramas, las fotografías, el diseño estético, todo está enfocado para que te sumerjas en un mundo de astronautas y te fascines con su entorno ¡Hasta sortean un traje auténtico de cosmonauta! Yo, por lo pronto, voy a aportar mis euritos para que, cuando la historia recuerde los albores de esta nueva era, pueda decir: yo estuve allí.

"¿Y si volvieses a casa… y ya no hubiese nadie? En 1975, el primer cosmonauta ruso en la Luna no consigue regresar, y se le da por perdido en el espacio. Él, sin embargo, a través de fantasmales mensajes de radio, clama haber vuelto a la Tierra y haberla encontrado vacía, sin un alma. Su irreal presencia y su voz irán destruyendo poco a poco el mundo de sus seres". Sinopsis