Haciendo una recopilación de los videojuegos que salieron basados en el popular anime Dragon Ball Z, podemos ver un desgraciado patrón. Ninguno logró capturar la esencia que atrapó a millones de espectadores. Sin embargo, Dragon Ball Z: Burst Limit logra un conjunto de puntos positivos y da como resultado una experiencia más que agradable para los no seguidores de la serie y una explosión de emoción para los amantes.
Hoy en día los juegos de pelea, tanto como las aventuras gráficas, se encuentran en un lugar bastante incómodo. Y la única manera de salir de ese pozo es cambiando. Evolucionando. Es por eso que un juego tan emblemático como el Street Fighter está pasando de 2D a 3D, porque lo que se quedan en el lugar desaparece.
Empecemos aclarando que ningún juego basado en DBZ (Dragon Ball Z) le hace justicia como Dragon Ball Z: Burst Limit. Finalmente hay un juego que se siente como un episodio de la serie. Y esto principalmente se debe a las llamadas drama pieces (piezas de drama), que son pequeñas escenas cinematográficas dentro de la pelea que benefician de diferentes maneras al personaje que las ejecuta. Puede ser restaurándole energía, o aumentando sus poderes. Viniendo de una serie donde el diálogo abunda durante las peleas, le da mucha más vida al juego.
En un principio tendremos a nuestra disposición tres protagonistas de los 21 posibles. Esto es bastante malo si tenemos en cuenta que para jugar con nuestros amigos no podremos elegir otros personajes hasta que los desbloqueemos en el modo historia. Y en cuanto a cantidad es muy limitada al recordar el juego de Playstation 2, Dragon Ball Z: Budokai Tenkaichi 3, que contaba con 161 personajes.
Hablando del modo historia, hay dos maneras de verlo. Para la persona que no sigue la serie animada puede ser bastante satisfactorio. Es más, puede ser hasta una buena manera de introducirse en la historia, y lo que es el anime. Pero para el fanático, aunque la jugabilidad y los personajes pueden dejarlo satisfecho, no va suceder lo mismo con la historia. Carece en detalles, y es bastante corta dependiendo del tiempo que el jugador tenga para dedicarle.
Entre las falencias de la campaña de un solo jugador, hay otras cosas que también podrían haber sido mejoradas. Ese es el caso de los controles, aunque la cantidad de ataques son muchos y varían en los diferentes personajes (tanto que podría abrumar a alguno no habituado a los juegos de pelea), las asignaciones del control son todas las mismas. Eso quiere decir, que al dominar todos los movimientos de un personaje, ya puedes hacer los ataques de los 20 restantes, quitándole así, la profundidad al juego.
Gráficamente DBZ: BL no tiene desperdicio, exceptuando algunos detalles, el juego se ve de maravilla. Y no solo se ve de maravilla, sino que en cada cuadro contiene la esencia de la serie animada. Los efectos, los colores, todos los pormenores juegan un papel importante e imitan a la perfección lo que podemos ver en la tele.
Burst Limit también te permite jugar peleas online con personas a través del mundo. Eso es, si logras mantener la conexión estable durante esas peleas. El problema principal es que las conexiones en diferentes partes del mundo son muy lentas, y tienen mucho lag. Es preferible que juegues con personas locales, en ese caso, funciona de maravilla.
Actualmente en el mercado español Dragon Ball Z: Burst Limit se encuentra disponible para Xbox360 y PlayStation 3, y el precio ronda entre los €66,90 y €62.90 respectivamente. Un precio razonable para lo que entrega el paquete completo.
En fin de cuentas, Dragon ball Z: Burst Limit es un fanástico y divertido juego de pelea. Perfecto para jugar con amigos. Puede ser disfrutado tanto por los fanáticos como aquellos que no tienen ni idea de quién es Goku. Ese es el resultado de gráficos fantásticos, innovaciones exitosas en un género donde supuestamente ya está todo inventado y controles accesibles.
Promedio: 77%
