Gracias al trabajo de desarrolladores oficiales y voluntarios, evaluar una distro de Linux es más sencillo que nunca. Sólo debes descargar la imagen ISO, copiarla a un pendrive con una aplicación compatible, e iniciar al sistema desde allí. Ahora, ¿qué tal suena evitar ese paso también? El portal DistroTest ofrece más de 200 distros para probar en línea, sin depender de imágenes ni entornos virtuales locales.
«Pasar a Linux» es una de las recomendaciones más frecuentes que escuchamos online a la hora de revitalizar un ordenador antiguo, pero en la mayoría de los casos, dicha recomendación se encuentra más vinculada al «rechazo a Windows» que a un interés legítimo en el pingüino. A esto debemos sumar una pregunta esencial: ¿Cuál es la mejor distro para nosotros?
Colocar a un sabor de Linux sobre otro equivale a iniciar una guerra termonuclear, por lo tanto, la estrategia más efectiva es escoger tres o cuatro, y evaluarlas ya sea en modo live, o dentro de un virtualizador. Sin embargo, hoy en NeoTeo tenemos una propuesta: Probar distros Linux en línea, sin instalar nada. Esa es la gran ventaja del portal DistroTest.
DistroTest presenta un total de 219 sistemas operativos y 628 versiones, de modo tal que no estamos limitados a «la última versión» de una distro, sino que también podemos cargar builds más antiguos para estudiar sus diferencias. Debian, Ubuntu, Mint, Arch, CentOS, Fedora, Slackware openSUSE… todos los titanes están allí, pero en la lista detectamos recursos secundarios como Gparted (administración de particiones) y Clonezilla (clonación de discos), una copia de FreeDOS, OpenBSD y FreeBSD.
Algunas distros son más complicadas de instalar que otras, y la simple existencia de DistroTest elimina de raíz ese punto de presión, al menos en lo que se refiere a evaluaciones.
¿Qué podemos decir del rendimiento? Seré sincero: No es bueno. La plataforma noVNC hace lo que puede, y algunos builds dependen de QEMU para su ejecución remota, o sea que el lag es moneda corriente.
Varias distros cuentan con información adicional de login (ya sea como root o usuario estándar), y existen límites de tiempo (por ejemplo, 90 minutos en nuestra prueba de CentOS). Más allá de estas restricciones, creo que la visión de DistroTest es excelente: «Pruébalo antes de odiarlo». Podrías terminar sorprendido.
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