El movimiento de liberación informática que ha significado la creación de GNU/Linux abrió un universo plagado de pequeñas estrellas a las que se las llamó distribuciones o más coloquialmente, distros. Inspirado en ellas, hace algunos meses Lisandro se armó una guía muy rica sobre la diversidad de estas distros y sus objetivos claros a la hora de resolver determinadas necesidades informáticas. Para sonido, para video, para servidores, para juegos, para lo que pidas, es probable que exista. En el marco de todas estas posibilidades, tenemos a Commodore OS Vision que, además de ser una distribucióm muy completa y moderna, es la distro de Linux que emula a la Commodore 64.
Yendo a las raíces, el sistema de esta distribución está basado en Mint 10 (kernel 2.6.35) y en Debian, que rememora a Gnome 2 y a la interfaz y tipo de escritorio que hoy se extraña un poquito. Sin embargo, desde la empresa dicen que la distro también podrá tener una versión que incluirá a Ubuntu como base. Hay también soporte integrado para la emulación de Commodore 64, que permite correr aplicaciones de 8-bits, 16 bits y 32 bits diseñadas originalmente para ejecutarse en ordenadores Commodore. En cuanto al OS en sí, tiene una sola versión de 64 bits retrocompatible con x86. Una curiosidad es que al instalarlo, Commodore Os Vision también instalará un disco de RAM, haciendo la emulación más real todavía.
La versión completa de esta distribución llamada Commodore OS Vision 1.0 Beta 9, no sólo ofrece el viaje al pasado, sino que incluye aplicaciones propias de cualquier distro Linux, incluyendo Internet, la oficina y aplicaciones de reproductor de medios. También suministrará otras actividades con programas reconocidos como OpenShot Video Editor, Linux Multimedia Studio, GIMP, herramientas web, de diseño, servidores, bases de datos, torrents y muchas otras aplicaciones que la hacen una de las distribuciones más completas en cuanto a software disponible.
Incluso hay algunas clásicas, como MilkyTracjker, Grafx2 y el Speech de AMIGA. La interfaz está completamente basada en AMIGA y en los sistemas de Commodore que vimos en el pasado glorioso. Los juegos juegan un papel importante, y desde los disponibles para Linux y aquellos que podemos instalar con Wine y Virtualbox, Commodore OS Vision ofrece compatibilidad con los juegos del viejo ordenador, también remakes.
Sobre la distro sólo queda decir que puede descargarse gratuitamente, pero los juegos clásicos y sus ROMS deben ser adquiridos por otros medios, como el contacto con la página de las desarrolladoras o con alguna inescrupulosa búsqueda en Google. Otro punto para mencionar es que la distribución instala mucho, demasiado, software. Es así que con facilidad llega a los 8gb y seguro habrá quienes protesten por esto. Fuera de todo lo demás, y de estar en beta, La distro de Linux que emula al Commodore 64 es una buena oportunidad de hacerte un viaje en el tiempo hacia el pasado sin dejar de vivir en el presente. ¡Muy recomendada!