En más de una ocasión hemos mencionado que entre los grandes inconvenientes asociados al uso de paneles solares aparecen su transporte, y el proceso de instalación en sí. Ahora, ¿hasta qué punto cambiaría la situación si las celdas solares se pudieran aplicar como un aerosol? En la Universidad de Toronto y el Centro de Investigación y Desarrollo de IBM Canadá están ansiosos por averiguarlo.
El proceso para instalar una membrana típica sobre un techo con goteras no ha cambiado mucho, aunque no podemos decir lo mismo sobre los materiales. Las membranas líquidas y en pasta permiten ahorrar una cantidad significativa de tiempo, y dependiendo del caso, también dinero. Claro que, eso no deja de ser un método de reparación. Imaginemos que en vez de membranas, el plan es instalar paneles solares. La adopción de la energía solar registró una aceleración notable en los últimos meses, y la mayoría de las estadísticas indican que igualará el costo de los combustibles fósiles dentro de un par de años. Aquellas personas que cuentan con el espacio suficiente pueden instalar paneles al nivel del suelo, pero otros no tienen esa ventaja, y deben apelar a sus techos. Ya hemos visto paneles solares en rollos y otros diseños con una gran flexibilidad, aunque todos ellos requieren una base en muy buenas condiciones, y que sea capaz de resistir cualquier peso agregado.
La idea de un panel solar líquido no es tan descabellada, pero en la Universidad de Toronto y el Centro de Investigación y Desarrollo de IBM Canadá tienen algo mejor: Celdas solares en aerosol. De acuerdo a Illan Kramer, uno de los investigadores al frente del proyecto, su sueño es ver a dos técnicos equipados como si fueran los Cazafantasmas, esparciendo paneles en aerosol sobre los techos de las casas. Básicamente, el aerosol está compuesto por puntos cuánticos sensibles a la luz. A modo de ejemplo, si estos puntos cuánticos fueran esparcidos sobre una película colocada en el techo de un coche tradicional, la superficie generaría suficiente energía para encender a tres lámparas incandescentes de 100 vatios. El nombre oficial del sistema es SprayLD, y está basado en la deposición atómica de capas.
SprayLD puede ser colocado sobre cualquier superficie flexible (como por ejemplo plástico) lo que permitiría en el futuro instalar estas celdas solares en aerosol sobre objetos con formas irregulares, desde los muebles en un patio hasta las alas de los aviones. El hecho de que ya posea un nombre formal nos hace pensar que el plan de fondo es su comercialización directa, sin embargo, será necesario vigilar la evolución de la tecnología de puntos cuánticos en los próximos años, y cómo se relaciona con los métodos de fabricación disponibles para que el producto final no sólo sea fácil de instalar, sino también económico.