Shift+Delete, botón secundario, un arrastre a la papelera… al borrar archivos, lo cierto es que no lo pensamos dos veces, salvo que el proceso sea accidental. Desde un punto de vista técnico, el archivo no se va a ninguna parte, y cualquiera puede recuperarlo con las herramientas correctas. Sin embargo, /death/null es un proyecto artístico que le concede una muerte simbólica a todo lo que borramos. Dicho de otro modo, funciona como un cementerio digital, un espacio que comparte miles de historias, sin decir una sola palabra…
Mientras lees estas palabras, tu ordenador crea y elimina toda clase de archivos. Muchos desaparecerán sin que lo sepas, verdaderos fantasmas en el sistema. Otros permanecerán como temporales, «víctimas» inevitables de las herramientas de mantenimiento. También están los archivos que borraste por accidente, dando lugar a una larga cadena de insultos coloridos.
Ninguno de ellos dura para siempre. No importan los cuidados, los backups locales, los sistemas de almacenamiento en la nube o los esfuerzos comunitarios. De la misma manera en la que vemos a la Web pudrirse, algunos archivos desaparecen para no regresar jamás. Y así llegamos a /death/null, un proyecto de Ulf Schleth que funciona como cementerio digital, un espacio que «trae la naturaleza finita de la existencia humana» a la red de redes. Si crees que alguno de tus archivos merece ser recordado de forma especial… puedes cargarlo aquí.
/death/null: «Obituarios» digitales para nuestros archivos
Todo lo que debes hacer es indicar la «fecha de cumpleaños» de tu archivo, cargarlo en la página (máximo de 25 megabytes), y si lo deseas, compartir tu dirección de correo para recibir un enlace que lleva a la «lápida digital». Para crearla, el sistema selecciona algunos bytes al azar del archivo, generando así una huella única.
Obviamente, /death/null no tiene ninguna clase de permiso o acceso a tus archivos locales, por lo tanto, deberás borrar ese contenido manualmente (¿o no?). El resto, depende de ti. Al observar las lápidas de /death/null, todos los visitantes pueden capturar pequeños detalles: Nombres, fechas, cartas y correos sin enviar, documentos, saludos de cumpleaños, animaciones, programas. Historias que empiezan y no terminan, proyectos a mitad de camino, deseos y frustraciones. ¿Por qué no dejas tu huella? El enlace está más abajo.
Sitio oficial: Haz clic aquí
