El CES 2012 no ha parado de darnos buenas noticias y adelantos tecnológicos que estaremos comentando durante el resto del año, y una de las más relevantes ha sido la de la presentación al público de Cube, una impresora 3D hogareña elaborada por 3D Systems. Algo así como la Apple Macintosh de las impresoras 3D, que se venderá a un precio de 1300 dólares y se podrá utilizar para fabricar pequeños objetos de plástico utilizando planos que creas y compartes en la red.
Han pasado decenas de recargas de cartuchos de tinta desde que hablamos por primera vez de las impresoras 3D y de los beneficios que tendría su implementación en la vida cotidiana del ciudadano moderno. Imprimir nuestros propios repuestos plásticos para objetos, nuestros materiales para construir hogares u obras de arte, e incluso para imprimir nuestra propia comida. El principal problema hasta ahora es que estas impresoras son caras y todavía no tienen una producción en serie que las pueda abaratar. Además, la mayoría tiende a tener utilizaciones muy específicas o contener una dificultad que escapa a muchos de los que sí las pueden adquirir. Luego de la presentación de la Cube, la ideas es que este estado de las cosas cambie. ¿Cómo? Con una impresora 3D hogareña y personal, que conjuga liviandad, simplicidad y accesibilidad dado el bajo nivel de desarrollo comercial de esta tecnología.
Cube es una impresora 3D inalámbrica que puede crear piezas de tamaño de medio a chico (140 x 140 x 140 mm) a través de su estructura que sólo tiene unas dimensiones de 36 x 36 x 46 cm y se puede poner sobre cualquier mesa de trabajo, además de sólo pesar 4kg. Las piezas que imprime no son las más fuertes o útiles del planeta, pues con 125 micras de espesor, las impresiones que podríamos hacer deberían ser útiles para juguetes, adornos, pequeños utensilios o (y creo que es lo mejor) repuestos para pequeños componentes de aparatos tecnológicos u mecanismos plásticos. Las piezas serían impresas en plástico ABS, totalmente reciclable y toxicológicamente apto en cualquiera de los 10 colores que están disponibles.
La propuesta desde 3D System es que cada una de las piezas impresas no llegue a costar más de 5 dólares y teniendo en cuenta que cada recambio de cartucho saldrá 50 dólares, la utilización de la impresora entra en el terreno de las más económicas. Estas características son similares a las de otras impresoras 3D salvo por detalles, pero lo más importante de Cube 3D no son sus beneficios económicos o la accesibilidad apta para todo público, sino la plataforma en línea que tiene donde desarrolladores e ingenieros comparten modelos y planos para que puedas imprimir en Cube. Esta es Cubify, y realmente recomendamos un paseo por las galerías para ver qué es lo que pasa ahí dentro. Como promoción, están ofreciendo 50 modelos gratuitos para imprimir cuando la impresora esté a la venta en Mayo de 2012. Pero igualmente siempre puedes crear tus propios modelos, venderlos, cambiarlos, participar en proyectos colectivos, etc. Singular desarrollo el de Cube, nos tendrá atentos a qué más tiene para ofrecer y qué más se crea en relación a ella, ya que tiene su API a disposición.