Una peli como las que hacían antes y que si se hiciera en el año 2059 o en 1986 sería igual. Una historia basada en hechos reales, que cuenta lo que cuenta. Y lo que cuenta está bueno. Trata sobre un abogado estrafalario que se mete en un juicio que le cambia la vida. A él y a todos los que lo rodean. Nada nuevo, pero de lo conocido lo mejor. No soy de recomendar estrenos, pero esta está en la línea del buen cine de siempre, alejado de toda pretensión de gloria y efectos especiales. Solo humanos siendo humanos.