El arquetipo de película de artes marciales perfecto. La esencia misma del género. De donde abrevan todas las que han de venir, Kill Bill y Karate Kid incluidas. Aquí está. Esto es. Un joven con una misión: vengarse de los invasores que masacraron a su pueblo. Un templo shaolín y las 35 cámaras de entrenamiento. Deja ya de leer esto y ve a verla.