Ella hacía fideos al paso hasta que se le presenta una oportunidad única: trabajar para un famoso chef que la pone bajo su tutelaje. Pero no todo lo que reluce es oro, pues Aoy pronto descubrirá que el precio a pagar es demasiado alto y se volverá contra su maestro. Hunger es un drama, pero no un dramón. Tiene elementos de thriller y cuenta una historia que te mantiene enganchado desde el principio. Para los que no gustan de las tantas películas de terror que recomiendo.