Peliculón. Cuenta del viaje, o más bien la odisea, de un vagabundo que, como todos los años, viaja kilómetros para pasar la navidad en un refugio lleno de amigos. Es una historia cruenta, pero no cruel. Dura, pero sin golpes bajos. Muy humana, pero sin bajadas de líneas endulcoradas. Es drama, pero del bueno. Confía en mi.