En mi opinión, lo mejor de Kevin Smith, por lejos (y eso que Clerks y Mallrats me parecen excepcionales piezas de época). Tiene a Jay & Silent, tiene monstruos de caca, está George Carlin haciendo de obispo, es el origen del meme Buddy Christ y, por sobre todo, tiene un guión excelente, que explora, mejor que muchas otras películas, las contradicciones de la iglesia moderna. La historia, para hacerla corta, es sobre dos ángeles caídos que quieren volver al cielo y están dispuestos a todo para lograrlo. Y también, claro, de aquellos que quieren detenerlos, entre los que se encuentra una descendiente directa de Jesús, un apóstol negro que quedó fuera de la Biblia y, claro, a mis “stoners” preferidos: Jay y Silent Bob. OBLIGADISIMA.