Lo que me he reído con esta película no tiene goyete, como decimos por acá. Trata de cuatro amigos que se conocen de toda la vida y aman estar juntos y gastarse bromas. En el medio, la vida, con todas sus cosas, incluyendo la muerte. Te ríes, lloras un poco, te emocionas otro tanto y, con suerte, aprendes a tomártelo todo con un poco de humor. Si puedes, mírala en su idioma original (italiano). Hay una versión en español dando vuelta, pero se pierde el carisma en las interpretaciones.
La parte del hijo del amigo que le describe la vida que lleva es inmortal
Una genialidad, sí señor