Los ejércitos de todo el mundo siguen volcando tecnología sobre los campos de batalla. Los ataques con drones y las bombas inteligentes han demostrado ser implacables, pero eso no quiere decir que los soldados vayan a desaparecer en el corto plazo. De hecho, un nuevo desarrollo ruso sugiere que los combatientes del futuro estarán equipados con un traje de combate que combina armadura personal, un exoesqueleto, y un casco inteligente.
El interés por llevar soldados robóticos a la guerra es muy grande. Más allá de los conflictos éticos y las peticiones para prohibir su desarrollo, los líderes sólo se enfocan en sus beneficios. El soldado-robot no se cansa, no duerme, no come, no bebe, no sangra, no requiere medicamentos, ni esparcimiento. El mantenimiento es básico, cualquier daño se puede reparar, y en el peor de los casos, construyen otro. Sin embargo, antes de que los generales salten de alegría frente a sus batallones de metal, habrá un largo proceso de transición que combinará a esas armas automáticas con soldados de carne y hueso equipados hasta la médula.
Un par de semanas atrás, La Universidad Nacional de Ciencia y Tecnología en Moscú y el Instituto Central de Investigación para la Construcción de Máquinas de Precisión (TsNIITOCHMASH) presentaron un nuevo prototipo de traje de combate que inmediatamente nos hace pensar en Star Wars, Halo, o el Combine de Half-Life 2. El traje fue parte de una exhibición especial con «10 Artefactos del Futuro», y por razones más que obvias capturó la atención de todos los visitantes. El traje es algo así como un híbrido entre armadura personal y exoesqueleto potenciado para reducir la fatiga del soldado, que además incluye un casco con visor electrónico integrado.
¿Cuánto habrá que esperar para ver a soldados rusos equipados con trajes avanzados? No será en el corto plazo, de eso estamos seguros. Hasta aquí, el traje es un concepto, una fuente de inspiración que ayudará a visualizar mejor los planes de desarrollo. Obviamente, el costo final será un factor crítico. Ya sabemos cómo son estas cosas: Los gobiernos quieren ejércitos indestructibles… pero también los quieren baratos.