Se trata de una oferta hecha por un hombre en Internet, que promete fabricar una isla artificial móvil por 300.000 dólares. La subasta en eBay sigue vigente y su creador dice poder crear islas del tamaño que se necesite.
Este hombre, que se hace llamar Jack (y declara ser legalmente ciego), ofrece en su sitio web, construir una isla a quién desee comprarla por un precio de 300.000 dólares (casi 195.000 euros). El "producto" que vendería mediría unos 33 metros, pero podría pedirse más grande. Parecería casi una oferta tentadora, de no ser por el hecho de que el sitio, de aspecto muy improvisado, no da información alguna sobre la persona que ofrece las famosas islas, ni mucho menos del producto o su fabricación.
Jack ha comenzado una subasta en eBay, con un precio base de 300.000 dólares y además ofrece otros productos y soluciones, igualmente extraños, en su sitio. Hay una casa submarina de 5 millones de dólares y propuestas para la solución de los grandes problemas del mundo que sin duda tienen bases científicas tan complejas y estudiadas que solo Jack podría comprender. Sus revolucionarias ideas serían: crear una isla-réplica de Israel para darles una nación a los palestinos, y agrandar la capa polar ártica usando islas artificiales de plástico, para controlar el calentamiento global y el tratamiento de la basura. A pesar de que estamos a favor de los conceptos innovadores, aún aquellos que dan la impresión de formar parte de un futuro muy lejano, las propuestas que Jack ofrece nos parecen demasiado bizarras y carentes de explicaciones o métodos para llevarlas a cabo como para sonar serias.