¿Alguna vez te preguntaste cómo se construye un avión de pasajeros? El vídeo que te mostramos hoy, registra -en solo dos minutos y medio- todo el proceso de ensamblado y pintado de un Boing 737-7H4. El avión pertenece a la Southwest Airlines y ha sido bautizado como “Florida One”. El avión quedó listo hace solo unos días y se ha sumado a la flota de la empresa, que ya posee varios aviones “personalizados” semejantes a este.
No siempre tenemos la oportunidad de seguir -paso a paso- cómo se realiza el ensamblaje de todas las piezas que componen un avión. En general tenemos una idea de cómo es este proceso, al que imaginamos semejante al que tiene lugar en una línea de montaje de automóviles, pero con piezas más grandes. Nada más alejado de la realidad. A pesar de que ambos procesos guardan algún parecido, lo cierto es que el tamaño de los aviones, sumado al pequeño número de ellos -comparativamente hablando- que se producen cada año, hace que muchas de las tareas que la industria automotriz realiza con robots deban ser realizados a mano.
El vídeo deja bien en claro que para fabricar un avión lo primero que se necesita es un espacio de trabajo adecuado. Un gran espacio. El proceso de ensamblaje comienza por el fuselaje. Este enorme cigarro de metal se recubre con varias capas de materiales especiales, que le proporcionan la adecuada aislación térmica y acústica del exterior. Dado el tamaño que tiene un avión, este proceso requiere de varias horas de trabajo. En esta etapa también se colocan los cables encargados de llevar las señales eléctricas y la energía de un extremo al otro del avión. Los pasajeros jamás verán nada de esto: los recubrimientos que se colocan al final ocultan toda esta maraña de cables y tejidos, proporcionando a la vez un acabado de lujo. Luego comienza el proceso de armado de la cabina. Esta es una de las partes -al menos desde el punto de vista eléctrico- más complejas del avión, ya que todos los elementos de control están o son comandados desde aquí. Cientos de kilómetros de cables son puestos en su lugar siguiendo un plan estrictamente elaborado de antemano. Como si fuese un mecano gigante, cada pieza tiene un lugar predeterminado y todo está pensado como para que no se comentan errores que puedan ocasionar problemas en el futuro.
Cuando el fuselaje está casi listo, llega el momento de montar las alas y el grupo de cola. Como dijimos antes, el tamaño de las piezas obliga a que todo sea bastante complicado y exija una perfecta sincronización. A pesar de que en esta película todo parezca muy fácil, no hay que olvidar que el proceso completo demanda semanas de trabajo, y que cada movimiento ha sido cuidadosamente planificado. En esta etapa también se montan el tren de aterrizaje y las ruedas, y se mueve todo el avión a la sección de la planta donde se colocarán los indispensables motores. Mientras todas estas tareas se van completando, un equipo sigue trabajando en el interior del fuselaje, colocando pisos, revestimientos del techo, alojamientos para el equipaje y todo lo demás.
Luego se comprueba el correcto funcionamiento de los mandos, del tren de aterrizaje y en general, de todas las partes que se han ensamblado. Por supuesto, una vez que el avión esté terminado será sometido a pruebas mucho más rigurosas que estas, pero en general los problemas más importantes suelen detectarse en esta etapa. A pesar de que aún quedan cientos de detalles por terminar, se puede decir que los trabajos más importantes ya se han realizado. En ese momento, el avión pasa a la sección de pintado. En este avión en particular el proceso de pintado es sumamente complejo, ya que la compañía había decidido estampar la bandera del estado de Florida -el avión es el “Florida One”- y como resulta obvio, aplicar ese tipo de diseño al fuselaje es bastante más trabajoso que pintarlo de un solo color. Por supuesto, el resultado ha sido espectacular.
Terminado el trabajo de pintura y efectuados los controles correspondientes -una tarea que no se ve en este vídeo pero que seguramente insume varios días- el avión está listo para volar. Southwest Airlines ya ha hecho esto antes: su flota posee otros aviones personalizados como ese (Arizona One, California One, Illinois One, Lone Star One , Nevada One, New Mexico One, y muchos más), y parecen disfrutar construyéndolos. ¿No te parece?
