Lisandro Pardo
A la hora de estudiar, no son pocos los que repudian el concepto de memorización. Lo ven como un atajo a corto plazo y de poco valor, pero lo cierto es que cuando se la aplica correctamente, la acción de memorizar es muy poderosa. Eso nos deja a las puertas de un software llamado Anki. ¿Qué es lo que hace? Presentar información valiosa y frecuente para el estudiante a través de flash cards, tarjetas que te ayudan a estudiar y aprender cosas rápidamente. Desde detalles casuales hasta exámenes completos, todo está a tu alcance.
Tabla de contenidos
Memorización y repetición espaciada
Seamos honestos: ¿Quién no trató de memorizar una lección entera cinco minutos antes de pasar al frente? Definitivamente es un «momento Anakin Skywalker», porque al principio te crees invencible, pero terminas con el trasero en llamas (?). Después del fuego, siempre aparecen los que dicen que memorizar es malo, que eso «no es estudiar». Sin embargo, memorizar datos no es una técnica defectuosa, sino que debe ser aplicada en el momento correcto.
Así llegamos al concepto de repetición espaciada o repaso espaciado. La repetición espaciada es una técnica que nos ayuda a aprender un material específico dejando pasar intervalos de tiempo cada vez más largos entre una sesión y otra. El material es presentado bajo el formato de tarjetas: Si su contenido es fácil de recordar, las tarjetas aparecen con una frecuencia menor en nuestras sesiones. De lo contrario, su repetición se vuelve mucho más «agresiva». Si te interesa esta técnica y quieres una solución basada en software, todas las flechas apuntan en la dirección de Anki.
Cómo estudiar y aprender con Anki
Lo primero que debemos entender de Anki es que se trata de un suplemento, y no un reemplazo. Si esperas encontrar una especie de comodín mágico que resuelva todas tus dificultades al estudiar y aprender, terminarás muy decepcionado. La repetición espaciada ayuda a «solidificar» lo que hemos aprendido, pero si nuestro proceso previo es deficiente, Anki no puede corregir eso.
El funcionamiento básico de Anki se divide en dos caminos: Puedes crear un mazo personalizado desde cero, o usar la función de mazos compartidos en línea. Los mazos disponibles en español se enfocan sobre el idioma, y eso revela el tipo de material con el que Anki brilla: Información bien definida, que se beneficia de la repetición. Un vocabulario para aprender un segundo idioma es el primer ejemplo que viene a la mente, pero muchos estudiantes de medicina angloparlantes juran sobre las virtudes de Anki debido al alto nivel de estandarización.
En cambio, la creación básica de tarjetas y mazos depende de cómo desees organizarte. Algunos usuarios prefieren un mega-mazo repleto de tarjetas manteniendo un ritmo muy intenso. Otros prefieren separar los temas en mazos dedicados para un aprendizaje más enfocado.
Crear una tarjeta esencial (pregunta y respuesta) es cuestión de un par de clics, pero Anki habilita un amplio nivel de personalización, como el cambio de colores o la posibilidad de insertar imágenes y audio en las tarjetas. Anki se encargará de volver a presentar la tarjeta en un minuto si nuestra respuesta es incorrecta, o posponer su repetición por varios días en caso de que nos resulte muy fácil.
En resumen
Anki es sin lugar a dudas una de las herramientas más flexibles que hemos encontrado para estudiar y aprender. Desde el potencial de las tarjetas hasta el soporte para add-ons, este software te permitirá memorizar lo que sea de forma sencilla y consistente. Sin embargo… «consistencia» es la palabra clave. Anki no es un asistente, y no te lleva de la mano. Desde cierto punto de vista, Anki es un lienzo en el que debes volcar tu estilo de aprendizaje diariamente, pero no dejes que eso te intimide. ¡Haz la prueba!
