¿Se acuerdan de CISPA? Después del huracán generado por SOPA, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos aprobó a la ley CISPA, también conocida como “ley Gran Hermano” y “catástrofe de privacidad”, entre otras cosas. La ley dejó exitosamente la Cámara en abril de 2012, pero nunca logró atravesar el Senado. Bien, ¿adivinen qué? CISPA está de regreso, y la Cámara aprobó a esta “versión 2.0” con unos contundentes 288 votos a favor, y 127 en contra. Si bien la diferencia fue enorme, esto no es más que un déjà vu para CISPA, porque si de alguna forma llega a ser aprobada en el Senado, la posibilidad de que sea vetada por el presidente es muy grande.
Una vez más en la brecha, queridos amigos. La ley CISPA ha vuelto, y sus aliados en la Cámara de Representantes le han dado un empujón considerable. Hace un año, la victoria de CISPA en la Cámara fue por 248 votos a favor y 168 en contra. Sin embargo, esta vez recibió unos llamativos 288 votos positivos, dejando solamente 127 votos expresando su rechazo, con 17 abstenciones. Sus defensores insisten en que no se trata de una ley de vigilancia, y que es absolutamente necesaria para enfrentar nuevas amenazas (léase ciberataques), pero la esencia de la vieja CISPA sigue estando allí: El intercambio “supuestamente” voluntario de información entre empresas privadas y agencias federales en caso de un ciberataque.
CISPA no ha tenido grandes cambios, y lo mismo se puede decir de su situación de fondo. Más allá de la contundencia de la votación en la Cámara, CISPA tiene una barrera casi imposible de superar en el Senado de los Estados Unidos, actualmente con mayoría demócrata. La Casa Blanca también adoptó la misma postura que el año pasado, anunciando el martes pasado que recomendará vetar la ley en caso de que llegue al escritorio del presidente Obama. Aunque la Casa Blanca ha dicho estar de acuerdo con el intercambio de información (algo que se puede rastrear a la Orden Ejecutiva sobre ciberseguridad que el presidente Obama anunció en el discurso del Estado de la Unión), privacidad y jurisdicción siguen siendo algunos de los temas que deben resolverse.
La Web no ha tardado en reaccionar a esta nueva aparición de CISPA, con múltiples sitios Web publicando los nombres de los representantes que votaron en favor de la ley, campañas para expresar a los políticos locales el rechazo a CISPA, y una petición que ya tiene más de 150 mil firmas. La aprobación de CISPA llega en un momento muy delicado, debido a los hechos ocurridos en Boston. Aunque el atentado nada tiene que ver con ciberseguridad, existen elementos que no dudan en asociar ciberataques con terrorismo, lo que puede llevar a preguntas con un contexto muy incómodo. Seguridad y privacidad vuelven a tomar la arena. ¿Sobrevivirá CISPA al Senado? Estaremos esperando.