Un grupo de científicos británicos someterán a un grupo de pacientes a una técnica que emplea células madre para curar una forma de ceguera muy común. Si los resultados preliminares son los esperados, los primeros pacientes recibirían el tratamiento dentro de cinco años.
Se trata de un proyecto totalmente inédito, que ayudaría a reparar las retinas dañadas utilizando para ello células obtenidas de cultivos de células madre de embriones humanos. Los creadores de esta técnica informaron que la cirugía necesaria es tan simple que algún día podría volverse tan rutinaria como lo son hoy las operaciones de cataratas.
Esta técnica es capaz de permitir a la gran mayoría de los pacientes con degeneración macular relacionada con la edad (DME) recuperar la vista. DME es una de las principales causas de ceguera entre los mayores de 50 años, que solo en Europa afecta a unos 14 millones de personas.
Actualmente existen algunos medicamentos, como el fabricado por Genentech Inc. (Lucentis) que pueden ayudar a uno de cada diez pacientes con un tipo de DME, llamada “DME húmeda”. El otro 90% de los pacientes tienen “DME seca”, para la que no hay tratamiento.
La degeneración macular relacionada con la edad es causada por una falla en las células del epitelio pigmentario de la retina (EPR), que forman una capa protectora bajo los conos y bastones sensibles a la luz que se encuentran en la retina. En algunos casos esta disfunción se ha asociado también al tabaquismo o los antecedentes familiares, entre otras causas.
El nuevo procedimiento ideado por los británicos consigue generar en el laboratorio células del epitelio pigmentario de la retina que sirven de “recambio”, a partir de células madre. Luego, los expertos inyectan en el ojo del paciente un pequeño parche de unos 4 a 6 milímetro formado con las células nuevas.
Los cirujanos logran restaurar la visión de algunos pacientes utilizando células madre de sus propios ojos, pero es un proceso es complicado y poco efectivo. La nueva técnica, que ha dado resultado en ratas, es mucho más prometedora. “Si no se ha vuelto algo de rutina en unos 10 años, significará que no hemos tenido éxito,” dijo uno de los responsables. “Tiene que ser algo que esté disponible para una gran cantidad de personas,” añadió. Se espera que la operación pueda ser realizada como un simple procedimiento de 45 minutos bajo anestesia local.
Extrañamente, este proyecto ha sido posible gracias a una donación de 8 millones de dólares que hizo un ciudadano estadounidense anónimo. Según los científicos del proyecto, esta persona se habría sentido frustrado por los límites que impone su país (EE.UU.) a la investigación con células madre.
Las células madre embrionarias son células maestras del cuerpo, capaces de generar todos los tejidos y órganos. Su uso es controvertido, porque muchas personas se oponen a la destrucción de embriones, aunque Gran Bretaña fomenta este tipo de investigación.