En el CeBIT se pudo ver una versión de prueba de este móvil que prometía características avanzadas a un precio razonable. Parece que va en camino, pero faltan ajustar unos cuantos tornillos.
El M8 mini One de Meizu del que ya se sabían algunas cosas (entre las cuales que es muy parecido al iPhone) está exponiendo en la CeBIT su software. Según sus creadores la apariencia no es todo y por eso quisieron mostrar el dispositivo en función. Pero es en ese punto que termina el cuento de hadas y empiezan los problemas. La versión que se ve en la exposición es una versión "de ingeniería" con hardware que no será el final (ni siquiera la pantalla táctil) y el software posee algunos errores.
Sin embargo, la gente de Engadget hizo un vídeo que muestra algunas características del software:
Si vieron el vídeo, ya habrán entendido a que se refieren con "versión no final del hardware". Definitivamente sería un dispositivo interesante si ofrece lo que promete a un precio sensato y se comporta de manera adecuada. Sin embargo, aunque haya tiempo hasta que el producto salga a la venta, el vídeo es un poco decepcionante.
Finalmente en esta versión del producto faltaban algunas características como Bluetooth, Wi-Fi y la cámara fotográfica por lo que no pudieron ser probadas.