Cuando Canon presentó a la PowerShot G7 X original en 2014, el público quedó sorprendido con la calidad de sus imágenes, sin embargo, eso no fue suficiente para ignorar sus limitaciones. Con el paso del tiempo, el gigante japonés supo exactamente qué era lo que debía corregir, y el resultado es la Canon PowerShot G7 X Mark II. La cámara ya lleva casi tres años en el mercado, pero gracias a su procesador actualizado, un objetivo mejorado, pantalla abatible con ángulos extra, un Burst decente y optimizaciones en el rendimiento de su batería, la Canon PowerShot G7 X Mark II sigue siendo un modelo muy popular.
Los fabricantes de smartphones continúan incorporando cámaras a sus modelos de alta gama, y una parte del público inevitablemente se pregunta qué sentido tiene comprar una unidad dedicada. Admito que hay fotógrafos allá afuera muy habilidosos a la hora de sacar fotos con smartphones, pero tarde o temprano todos apreciamos las capacidades superiores de las cámaras individuales, aún si son ultracompactas. En los últimos meses hemos explorado a varias, desde la Sony DSC-RX100 V que está a punto de perforar el piso de los 750 euros, hasta la Canon PowerShot G9 X Mark II, ubicada cómodamente por debajo de los 400 euros. Hoy vamos a estudiar de cerca a una ultracompacta que se ubica entre ambas: La Canon PowerShot G7 X Mark II.
Canon PowerShot G7 X Mark II: Para que no te pierdas nada durante el viaje
Anunciada originalmente a mediados de 2016, la Canon PowerShot G7 X Mark II posee un sensor CMOS de 20.1 megapíxeles efectivos, acompañado por el procesador de imágenes DIGIC 7. Su sensibilidad ISO se extiende de 125 a 12.800 con un Boost de 25.600, mientras que la velocidad de obturación oscila entre 1/2000 y 30 segundos. El tamaño de la pantalla LCD se mantiene en tres pulgadas con una resolución de 1.04 millones de píxeles, pero además de presentar soporte táctil, Canon decidió mover la bisagra a la parte inferior, lo que nos permite una apertura de 180 grados hacia arriba (ideal para selfies), y 45 grados hacia abajo. Otro aspecto optimizado es el del agarre. La G7 X original podía ser un poco resbaladiza, pero en la Canon PowerShot G7 X Mark II tenemos un grip mucho más firme, sin disparar su peso.
El sistema de autoenfoque en la Canon PowerShot G7 X Mark II nos habla de 31 puntos basados en detección de contraste, y representa un salto de calidad muy importante frente a la G7 X estándar. En general, la detección de rostros y el rastreo posterior bajo el modo simple hacen un buen trabajo, pero si necesitas capturar algo de movimiento extra, se recomienda pasar a un punto y autoenfoque continuo. Eso nos lleva a los niveles de Burst. El promedio para el modo normal es de 4 FPS, con un búfer de 32 disparos en RAW, y el resto de la tarjeta en JPEG. En cambio, el modo de alta velocidad supera los 8 cuadros por segundo, a menos que actives el autoenfoque continuo, bajando a unos 5.5 FPS. Un detalle técnico a tener en cuenta es que la cámara requiere 4 o 5 segundos para limpiar el búfer disparando JPEG, y 14 o 15 en RAW. Parece un tiempo excesivo a simple vista, pero la Canon PowerShot G7 X Mark II no es una cámara de acción, y siempre podemos buscar una tarjeta más veloz para compensar.
La interfaz de la Canon PowerShot G7 X Mark II no presenta cambios radicales, una decisión del gigante japonés que siempre vamos a apreciar. La parte superior está dominada por el dial de modo, y a su alrededor encontramos un anillo que sirve de dial para la compensación de exposición. Si miras a la cámara de frente, notarás una palanca en el cuadrante inferior derecho. Dicha palanca sirve para modificar el tipo de avance en el anillo de control, ya sea escalonado o continuo. Regresando al dial de modo, allí aparecen las funciones clásicas de Canon: Full Auto, Automático híbrido, Automático programable P, Prioridad de obturación Tv, Prioridad de apertura Av, Manual M, atajo personalizable C, menú de escenas SCN y vídeo. Una vez más, Canon nos entrega un manual muy completo, y cualquier detalle secundario podrá ser resuelto con su ayuda.
La Canon PowerShot G7 X Mark II prioriza la captura de imágenes y elementos como el procesamiento RAW. Ahora, eso no quiere decir que su vídeo sea deficiente. La cámara utiliza el tamaño completo del sensor y no se reporta ningún crop, pero la resolución máxima está clavada en 1080p60. Si tu plan es grabar 4K y pagar lo mismo, tienes opciones al nivel de la Olympus PEN E-PL9, o la Panasonic Lumix DMC-LX15 que es más económica. Sin embargo, el 1080p60 de la PowerShot G7 X Mark II es impresionante, aún en condiciones de baja luz. La conectividad WiFi está allí, y en caso de que tengas en tu poder un smartphone Android con NFC, su enlace será aún más sencillo. El resto básicamente depende de la aplicación Canon Camera Connect, que recibió un update el lunes pasado. La respuesta de los usuarios ha sido mixta, por lo tanto, no te preocupes demasiado si la app no coopera al principio.
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Accesorios para Canon PowerShot G7 X Mark II
Con un precio de 545 euros, la Canon PowerShot G7 X Mark II tiene razones suficientes para justificar un leve premium, pero eso no la libera de una buena selección de accesorios. No trae sellado contra el clima, y su batería necesita asistencia en sesiones prolongadas, algo bastante normal entre las ultracompactas. Nuestra selección busca cubrir eso y más:
Baterías y alimentación
El mercado no nos abandona al momento de ofrecer accesorios alternativos para cámaras Canon, y la PowerShot G7 X Mark II no es ninguna excepción. Con un promedio de 265 disparos, no es complicado imaginar que muchos fotógrafos casuales estarán satisfechos con una sola carga, pero si tu objetivo es exprimir a la Mark II durante un viaje o una salida prolongada, entonces no es mala idea sumar una batería Gloxy compatible con NB-13L, y un cargador híbrido 2 en 1 para casa y coche. Con una batería extra y un cargador de esas características, cualquier falta de energía debería quedar resuelta.
Trípodes y soportes
La Canon PowerShot G7 X Mark II recibió algunos ajustes en su cuerpo para mejorar el agarre del usuario, pero eso no provocó un problema de transporte. En realidad, el peso de la cámara es de 319 gramos con la batería instalada, y eso habilita el uso de soportes relativamente pequeños. El primer trípode para Canon PowerShot G7 X Mark II que vamos a recomendar es el Manfrotto Pixi, con una tolerancia máxima de un kilogramo, y al que puedes usar como una especie de mini selfie stick si lo deseas. La opción overkill ya es clásica en NeoTeo, y me refiero al Clampod Takeway T1. Compacto, robusto, resiste hasta 40 kilogramos, y se agarra con firmeza a lo que sea.
Bolsos
La Canon PowerShot G7 X Mark II necesita ser protegida de polvo y líquido, y quien la aproveche hasta el límite deberá luchar con ambos. La buena noticia es que no pide demasiado. En primer lugar, una funda Lowepro Dashpoint 30 con interior acolchado y bolsillo secundario cuesta menos de 15 euros. Y en segundo lugar, el bolso antirrobo Pacsafe Camsafe ZP resiste tanto perforaciones como cortes, además de poseer ganchos que bloquean el acceso a su interior, y un diseño bastante discreto, que no llama la atención.
Tarjetas de memoria
Existe cierta demora en el vaciado del búfer cuando utilizamos el Burst en la Canon PowerShot G7 X Mark II, y con eso en mente, es lógico tratar de buscar las tarjetas de memoria más rápidas. Con una escritura de 60 megabytes por segundo, es imposible equivocarse al adquirir una Transcend SDXC de 128 gigabytes, pero si buscas algo un poco más económico, su variante de 32 GB y 45 megabytes por segundo de escritura cumplirá con la tarea.
Kits especiales
- Caja de luz con 4 fondos de colores
- Dos focos para iluminar el objeto
- Incluye un soporte para la cámara
- Ideal para la fotografía de producto
- Totalmente portátil
Bloquear la entrada de polvo y líquido durante el transporte es una excelente estrategia, y una forma sólida de proteger nuestra inversión, pero de nada servirá si no repetimos el mismo esfuerzo en casa, usando un kit de limpieza. La gente de Gloxy nos da todo lo que necesitamos en un conveniente paquete 6 en 1, el cual incluye fuelle, líquido limpiador, toallas, y un cepillo. Y ya que estamos en casa, ¿por qué no añadir al combo un mini estudio? Con un tamaño de 40 por 40 por 40 centímetros, puedes instalarlo donde lo desees. Si planeas vender algo, que sea con estilo, y una buena foto.
Bandera a cuadros, al menos por hoy. La Canon PowerShot G7 X Mark II se posiciona un par de escalones por arriba de la PowerShot G9 X Mark II gracias a su pantalla abatible, los controles dedicados de exposición, el Burst más flexible, y varios detalles adicionales (entre ellos, el grip). La ausencia de soporte es un asterisco en su expediente, pero ya conocemos a Canon: Mejor un 1080p impecable que un 4K a medias. Si esto suena bien y te agrada ser parte de la familia Canon, la PowerShot G7 X Mark II no te defraudará. ¡Buena suerte!