El sistema de etiquetas en la red social más importante de la Web podrá tener todas las buenas intenciones que quiera, pero en la mayoría de los casos sólo logra molestar a los usuarios y/o colocarlos en una situación comprometida. Si bien existen diferentes métodos para eliminar y reportar etiquetas en Facebook, también se puede adquirir una de las camisetas REALFACE Glamoflage, cuyos patrones basados en rostros de famosos tienen como objetivo confundir a los algoritmos encargados del etiquetado.
Lo cierto es que nunca vamos a poder escapar del todo a las etiquetas mientras estemos en Facebook. Si somos parte de algún grupo o comunidad dentro de la red social, alguien va a enviar un mensaje general con una imagen, y no va a tener mejor idea que etiquetar a todo el grupo en esa imagen. Ahora, esa clase de etiquetas tal vez no sea tan problemática, pero imagina que deseas ir a una fiesta, y no quieres quedar etiquetado automáticamente en las fotografías que podrían llegar a publicarse. Facebook ofrece varias opciones en su sección de privacidad para administrar todas las etiquetas, sin embargo, ha aparecido un método bastante curioso para confundir al sistema: Camuflaje.
El nombre oficial para estas camisetas es REALFACE Glamoflage, un proyecto a cargo de Simone C. Niquille. El camuflaje de las camisetas está inspirado en los mismos patrones que usaban los barcos durante la Primera Guerra, con el agregado de rostros de famosos, al estilo de Barack Obama, Michael Jackson o Britney Spears. Las camisetas no impiden el funcionamiento del sistema de etiquetado, pero lo hará sudar un poco tratando de “enfocarse” sobre alguno de los rostros. Cuanto más ajustada le quede la camiseta al usuario, más debería confundir a los algoritmos. El precio de cada camiseta es de 65 dólares, pero representan apenas una parte del plan de Niquille, que incluye comercializar accesorios como lentes de contacto que ofuscan la imagen de una cámara cuando reflejan la luz del flash. No tengo ninguna duda al decir que las camisetas son espantosas, pero si el camuflaje funciona como promete, tal vez no haya que dejarlo a un lado tan rápido.