¿Recuerdas el juego Six Days in Fallujah? Aquel FPS que supuestamente iba a representar realísticamente uno de los conflictos militares más recientes de Estados Unidos. Pues está claro que al final no salió, pero sus creadores tomaron parte de la tecnología del título y crearon Breach, un FPS militar multijugador con algunos elementos destruibles. Pero más que nada es un FPS genérico que no ofrece mucha novedad.
Con el estado en el que se encuentra el mercado de videojuegos actualmente, hacer un FPS militar multijugador es de tontos o muy atrevido. Pero lo que está claro, es que es necesario ofrecer algo completamente diferente a la norma, porque si no, no es posible. Uno de los mejores ejemplos es ver cómo Electronics Arts falló al lanzar Medal of Honor, que no le hizo un rasguño a un juego como Call of Duty: Black Ops, que sin dudas no era el mejor de la serie, pero tiene un nombre actualmente intocable. Y Breach es exactamente eso, un juego creado por quienes querían lanzar Six Days in Fallujah, que presenta un estilo de juego similar a Battlefield: Bad Company 2 y espera que la gente lo prefiera sobre el rey del género, Call of Duty.
Para empezar, Breach no tiene nada similar a una campaña, sino que solo ofrece algunos modos para jugar en línea. Y todos estos modos son en equipos, algo que no está mal, ya que demuestra el tipo de juego que es. Al ingresar a una partida puedes elegir entre el equipo estadounidense o el ruso, pero no hay muchas diferencias entre sí, es más, ni siquiera dicen que son de esas nacionalidades, pero así suenan. En total, existen cinco mapas entre los cuales elegir —y sus diseños ofrecen muy poca estrategia. Finalmente puedes elegir entre cuatro clases y, como puedes imaginar, no hay mucha sorpresa en estas tampoco. Las opciones son: Tirador, artillería, sniper y soporte, cada una con sus armas y habilidades particulares.
Ahora bien, todos estos detalles están muy bien, pero qué tal el juego en sí. Bueno, Breach es un FPS muy tradicional y competente. Disparar se siente bien y por momentos hasta es divertido. También puedes cubrirte con varios objetos del escenario, momento en el que la cámara se ubica a las espaldas del personaje. Aquí comienza uno de los problemas, ya que para asomarte y disparar no solo debes apuntar, sino también hacer para arriba, lo que es incómodo y va en contra de cualquier avance en este tipo de juegos en los últimos años.
Sin embargo, el punto principal mediante el cual venden el juego, es la capacidad que tiene para destruir partes del entorno. No solo puedes hacer agujeros en algunos edificios, sino que puedes destruir cobertura y hacer pozos en el piso. Esto sirve muy bien para, por ejemplo, destruir un puente por el que podrían pasar enemigos. Sin embargo, no afecta tanto el balance de un encuentro como si lo hace en Bad Company 2. El nivel de destrucción no es lo suficiente alto para impactar el juego en gran nivel.
Otro problema es que la progresión del personaje es muy lenta. En una buena partida puedes conseguir hasta 500 puntos de experiencia, lo que no te alcanza para casi nada. Pero lo que es verdaderamente molesto, es que debes desbloquear todo para cada clase individualmente, de manera que si compras la mira laser para el tirador, tienes que hacerlo nuevamente para la artillería, algo bastante ridículo y muy mal pensado. Lo adictivo de poder mejorar personajes es que siempre estés desbloqueando cosas nuevas, no tener que dar los pasos que ya diste una y otra vez.
En definitiva, Breach es competente. Hace lo que quiere hacer bien, pero no sobresale de ninguna manera. Nada de lo que presenta es verdaderamente digno de mención y, lo que sí es, son los feos gráficos que presenta y los problemas de framerate que arruinan la experiencia. Pero lo que más nos sorprende es lo genérico del concepto. Con tantos FPS militares en el mercado, ¿por qué hacer uno más? Simplemente no lo sabemos, pero Breach no hizo nada por nosotros. Puedes conseguir Breach para PC—la versión recomendada— por US$11.99 y para Xbox 360 en el bazar en línea de Xbox Live.
Puntaje: 60%
Conclusión: Genérico y decente son dos palabras que le quedan muy bien a Breach.