Aunque todavía manejamos con las manos, proyectos como el de Google buscan que no manejemos más y seamos transportados por vehículos inteligentes. Tomando el tema por otro lado completamente diferente, en la Universidad de Berlín están trabajando en una tecnología conocida como BrainDriver, que permitiría al conductor controlar el vehículo en su totalidad utilizando solamente su cerebro.
El futuro de los coches es por el momento incierto. Algunos están desarrollando maneras de hacerlos más seguros ayudando al conductor y otros directamente están quitando a la persona de la ecuación para que se conduzcan solos. En la Universidad de Berlin (Freie Universität Berlin), el profesor de Inteligencia Artificial, Rául Rojas, está desarrollando una tecnología conocida como BrainDriver que permitiría conducir un coche utilizando únicamente el poder del cerebro humano.
El líder del proyecto explica que pasaron por todo tipo de interfaces, como iPhone, iPad y hasta un dispositivo que sigue la mirada, conocido como el EyeDriver, que fue presentado a principios del año pasado. Casi un año después, tienen una interfaz completamente nueva donde utilizan un Emotiv Neuroheadset, un equipo de electroencefalografía o EEG diseñado para videojuegos que capta las señales electromagnéticas del cerebro y las transforma en patrones que son asociados a comandos.
Antes de subirse al coche, le presentan al individuo unas pruebas, como mover objetos virtuales en direcciones específicas, con la mente. Una vez que aprendió a mover objetos pensando, utiliza esos mismos comandos para doblar, acelerar o frenar sobre el coche de prueba. Este, es un Volkswagen Passat Variant 3c modificado con una cámara en la parte superior, que permite tener 360° de visibilidad. El vídeo ubicado en la parte superior, muestra las pruebas que llevaron a cabo en un espacio seguro y abierto, donde funcionó muy bien.
Está claro que BrainDriver es tan solo un prototipo, como lo fue EyeDriver en su momento. Todavía le faltan una buena cantidad de ajustes y pruebas para poder comenzar a tomarlo en serio y, aún así, todavía habría que hacer estudios para ver si se trata de una manera segura de manejar. Pero como explican sus creadores, puede ser muy útil en combinación con vehículos autónomos, sin mencionar que podría darle la oportunidad de manejar a personas paralizadas o con problemas de movilidad.