Si estás interesado en la fotografía, sabrás que uno no puede arreglarse sin un programa para el procesado de imágenes. Éstos no solo permiten ordenar y catalogar las fotos, que pueden provocar un verdadero caos si no se mantienen en orden, si no que también son necesarios para "revelar" las fotos en formato RAW. Hoy te presentamos blueMarine, uno de estos programas, pero a diferencia de los más populares, gratuito y open-source.
Se trata de un software bastante nuevo, y quizá por esto aún no está en grado de competir con los más grandes, como son Adobe Lightroom o Apple Aperture. Sin embargo, este pequeño programa open-source nos permite ver y organizar nuestras fotos, tal como los otros dos, y también nos ofrecen la mayoría de las aplicaciones más simples que éstos tienen, como el revelado de formato RAW.
Además, este programa está pensado para satisfacer a los fotógrafos especializados ofreciéndoles herramientas específicas. Por ejemplo, a quienes les gusta tomar fotos de paisajes y panoramas podrían sacar provecho de la posibilidad de incluir notas de campo o del planificador de viajes con mapa incluido, además de la capacidad de añadir geoetiquetas e importar datos del GPS. Detalles como estos podrían resultar más agradables a los fotógrafos, aunque blueMarine aún necesita desarrollarse un poco más para poder comenzar a competir seriamente con los demás programas de su clase.
Entre las cosas más importantes que aún están en desarrollo del blueMarine está la capacidad para tratar las fotos: el programa aún no permite editar las fotografías, lo cual es una falla importante para un programa como éste. Sin embargo, siendo un software de código abierto, cualquier programador puede trabajar para solucionar este problema, y, de hecho, ya se está haciendo.
Además, blueMarine posee una característica muy importante en la cual supera a los demás programas: es completamente gratuito. De hecho, ya se pueden descargar versiones de prueba en el sitio oficial. Esto lo hace ideal para fotógrafos aficionados o principiantes que no pueden permitirse gastar dinero en alguno de los softwares desarrollados por las grandes compañías especializadas.