¿Alguna vez te ha pasado que estando en el teatro o en el cine, el sonido de un teléfono móvil sonando haya hecho que te pierdas parte de la función? Seguramente sí. En estos casos, y en otros que involucran cuestiones de seguridad, se suelen utilizar dispositivos bloqueadores de señal, a pesar de estar prohibidos en casi todo el mundo. ¿Tú qué opinas?
Si bien es cierto que en determinadas situaciones el empleo de forma indiscriminada de teléfonos móviles puede resultar molesta y hasta peligrosa, es necesario aclarar que el bloqueo de su señal es ilegal en casi todos los países del mundo, ya que las frecuencias utilizadas para su funcionamiento se engloban en el mismo grupo que las de radio o TV, uno de los nichos radioeléctricos mas regulados que existen.
La polémica surge porque desde hace algún tiempos e están ofreciendo en sitios de subastas en internet o bien en comercios especializados en electrónica, unos dispositivos que por precios muy bajos (a partir de 40 euros) emiten una señal que interfiere las señales de radio que necesitan los móviles para comunicarse, inutilizándolos. El radio de acción de estos aparatos va desde los 10 metros hasta más de 100.
Hay muchos ejemplos de lugares en los que un dispositivo “jammer” (tal como se los denomina en la jerga) puede resultar útil. En el teatro más antiguo de Rusia, el Alexandrinsky, se ha decidido bloquear las señales de los móviles para que no suenen en plena actuación. Esta decisión se tomó porque es muy común que durante las obras de teatro, óperas, ballets y películas se oye continuamente el sonido de los móviles. Algunos espectadores han perdido la vergüenza y no tienen problemas en hablar por su móvil a pesar de las advertencias de apagar el teléfono al principio de la obra.
China también bloquea la señal de los teléfonos móviles, pero para impedir a los estudiantes copiarse en las universidades. Dado que por parte de los estudiantes es muy común recibir ayuda mediante llamadas o mensajes de texto, se están equipando las salas de exámenes con dispositivos bloqueadores de llamadas, “advirtiendo de que esta acción puede no ser buena para la salud de los jóvenes”, tal como señalo la agencia de noticias Xinhua.
El tema ha sido tratado por el NYT, que ha publicado en su blog un artículo donde denuncia que el bloqueo de las señales de los teléfonos móviles se está volviendo una moda, a pesar de ser un delito en los Estados Unidos. Muchos bares, restaurantes, e incluso salones de belleza está utilizando estos aparatos, a pesar de exponerse a multas cuyo importe comienza en los u$s 11 mil.
En NeoTeo estudiamos las ofertas de equipos de bloqueo disponibles en internet. Encontramos decenas de ellos, cuyos nombres o direcciones no proporcionaremos aunque no debería ser difícil que los encuentres si te pones a buscar un poco. Como ejemplo, encontramos uno que tiene el tamaño de un mazo de cartas, con cuatro antenas de unos 15 cm. Según puede leerse en su publicidad, el rango de “cobertura” efectiva es de 100 metros, y es capaz de bloquear las señales correspondientes a CDMA (869 ~ 894Mhz); GSM (925 ~ 960Mhz); DCS (1805 ~ 1880Mhz) y PHS (1900 ~1990Mhz). Funciona simplemente conectándolo a la red eléctrica (110 a 220V). Su costo es de 150 euros.
Evidentemente, se llega a este punto por culpa de los desaprensivos que utilizan el teléfono móvil en áreas que no corresponden. Difícilmente sea indispensable efectuar una llamada desde una sala de teatro, pero sin embargo ocurre todo el tiempo. No obstante, el uso de bloqueadores de señal no es la mejor solución. Su zona de cobertura puede abarcar áreas ajenas a las que se quiere proteger, y su efecto sobre la salud humana no está demasiado claro.