En una sesión normal de navegación, la información puede pasar por varios servidores antes de llegar a su destino, y así se instala la posibilidad de que alguien en el medio o al final la recoja para su propio beneficio. La idea de descentralizar nuestra experiencia Web y evitar eso no es nueva. La gente de BitTorrent trató de implementarla con su ahora desaparecido proyecto Maelstrom, pero en Blockstack están dispuestos a recoger la antorcha desarrollando un navegador que utiliza blockchains.
Nuestra dependencia de la nube es cada vez mayor. Los grandes nombres del mercado siguen integrando servicios hiperconectados, lo que en ciertos casos implica colocar más información personal en servidores remotos, o como alternativa, que circule a través de ellos. Algunos de los beneficios son muy interesantes (por ejemplo, volcar respaldos automáticos en Google Drive o Microsoft OneDrive), pero en el fondo hay detalles que generan muchas dudas. La creación y el análisis de perfiles, la publicidad personalizada, el Big Data que no para de reclamar datos y todas las brechas de seguridad nos hacen pensar en opciones paralelas. Una de ellas es la descentralización, vital en espacios como el intercambio de archivos y las criptomonedas, con Bitcoin a la cabeza. La gran pregunta es: ¿De qué modo se puede implementar un sistema de descentralización frente a una Web dinámica que cambia a cada segundo?
El proyecto Blockstack quiere intentarlo, y su estrategia se reduce a usar blockchains. «Se reduce» tal vez suene un poco injusto, porque Blockstack acumula casi cuatro años de desarrollo, pero sus responsables decidieron hacer el anuncio formal ahora. Técnicamente, la versión inicial de Blockstack está pensada para desarrolladores interesados en crear apps que funcionen de manera descentralizada, y a decir verdad ni siquiera es un navegador completo. El código presenta a una extensión compatible con Chrome, Safari y Firefox, siempre y cuando los sistemas operativos sean MacOS o Linux (el build de Windows estará disponible más adelante).
En otras palabras, el concepto aún está muy verde. De hecho me atrevería a sugerir que tiene meses de trabajo por delante (más de los seis sugeridos), ya que también depende de desarrolladores externos, pero esos desarrolladores no son magos que digamos. La descentralización funciona muy bien para servicios específicos, y las blockchains han demostrado su robustez, sin embargo, por más tentadora que sea la idea de recibir los datos de una página o un servicio usando múltiples fuentes sin tocar servidores bajo control corporativo, hay desafíos importantes que deben ser resueltos. Aún así, espero que lo logren, y que Blockstack se transforme en una alternativa más rápida, segura, y privada al momento de navegar.