Desde su salida hace 2 años, BitCoin cosecha diversas miradas sobre su accionar y su influencia en la economía real. Sus usos más comunes se mezclan con sospechas de lavado de dinero, compra de estupefacientes y mucho más, por lo que está constantemente investigada por diferentes organismos. En este marco, la confianza de sus usuarios ha descendido considerablemente, y si algo faltaba para complicar más las cosas era un ataque contra la red y sus asociados. Así ha sucedido, con el robo de información y de dinero que se ha hecho a cuentas de BitCoin y el centro de intercambio monetario Mt. Gox.
Bitcoin, un esforzado e ingenioso intento por crear un sistema económico alternativo, se mostró como una presuntuosa alternativa a la forma convencional de administrar y transferir dinero en la red, evitando los trastos que para algunos significa la regulación estatal y las limitaciones vigentes en cuanto a compras que traspasan fronteras. La moneda virtual creada y compartida a través de un sistema P2P descentralizado, es reconocida por la seguridad que la envuelve, con contraseñas con un alto nivel de cifrado, cuentas anónimas y servidores doblemente asegurados. Aun así, no ha podido escapar de estar inmersa en el medio de uno de los robos más importantes. El asunto sucedió el domingo, cuando un usuario manifestó que al menos 25.000 bitcoins habían sido sustraídos de su cuenta, que a forma de conversión en su momento, eran cercanos a medio millón de dólares. El hack se basaba en un malware, que buscaba tu archivo de billetera virtual con nombre wallet.dat, aunque no se han confirmado más casos.
Este caso no fue el único, ya que otro más destructivo sacudió la confianza en BitCoin cuando la red de intercambio de dinero virtual Mt.Gox fue hackeada, haciendo que una cuenta determinada pusiera a la venta una gran cantidad de bitcoins, logrando que el precio bajara de $17.5 por BTC a centavos en un corto lapso de tiempo. Para quienes entiendan cómo funciona el mercado bursátil, pueden tomar como referencia cuando una empresa vende gran parte de su paquete accionario en cuestión de segundos, generando una inestabilidad temporal en un sistema que se supone regulado. Siguiendo con el hack, que tiene origen según IP en Hong Kong (recordemos que todo tipo de accesos y transacciones en BitCoin queda registrado públicamente), el atacante no ha podido hacer más que daño, pues la limitación de retiro de dinero estaba activada en esa cuenta y sólo ha podido quedarse con 1000 dólares.
Sin embargo el daño fue mayor en otros sentidos, pues el acceso de este tipo de hackers ha abierto una forma en la que apropiarse información de miles de cuentas, que incluye direcciones de correo, contraseñas cifradas e información general sobre transacciones. Igualmente, los responsables de BitCoin han dicho que debido a la naturaleza del cifrado de BitCoin, estos datos están totalmente asegurados, y que el problema radica únicamente en la estrategia de seguridad de Mt.Gox, quien ahora se encuentra fuera de línea. BitCoin permanece por estos momentos en un proceso complicado para un sistema que se maneja no sólo por la ambición y la comodidad de la creación e intercambio de dinero, sino también por la confianza, que así como pasa en los sistemas monetarios regulares, cuando se pierde, es muy difícil recuperarla. Sin embargo no hay que descartar una especie de campaña de desprestigio, ya que BitCoin está en el ojo de la justicia estadounidense y europea por brindar una plataforma propicia para el lavado de dinero, compra de drogas y otro tipo de acciones legalmente penadas.
