Una cosa es recorrer los paisajes de Skyrim desde tu asiento, y otra es subirse a una caminadora para luchar en el Team Fortress 2… pero esta forma de usar al Oculus Rift es completamente diferente a todo lo que has visto hasta ahora. El proyecto se llama Birdly, y combina al casco virtual con una mesa/camilla especial, que ayuda a virtualizar el vuelo de un ave. ¿Quieres sentirte como un pájaro?
Debo reconocer que algunos de los proyectos basados en el Oculus Rift son cada vez más… extraños. Por supuesto, esto demuestra qué tan amplio es el abanico de posibilidades bajo el ala de la realidad virtual, sin embargo, varias de estas ideas serán indudablemente residentes permanentes en laboratorios y talleres, a cierta distancia del usuario final. Por ahora, el “accesorio” que mejores chances tiene de acompañar a un Oculus Rift es lo que conocemos como caminadora. Además de ser un método efectivo para reducir las limitaciones físicas de cualquier sesión virtual, también se ha adaptado de maravillas a los FPS, un género que probablemente será muy popular entre los usuarios del Rift. Ahora… lo que tenemos aquí es diferente. No estoy seguro si debo llamarla “máquina voladora”, “mesa virtual”, “camilla sensorial”, o alguna variante similar. De momento, vamos a utilizar su nombre oficial, Birdly.
Birdly te hace volar… virtualmente hablando, claro. Con el Rift en la cabeza, el usuario se sube a este artefacto, coloca sus manos en los soportes, y cuando la simulación se carga, todo lo que tiene que hacer es empezar a batir los brazos como si fueran las alas de un pájaro. Birdly permite cambiar de dirección y planear, pero eso no es todo. En la parte frontal hay un ventilador. A medida que el vuelo virtual aumenta su velocidad, el ventilador arroja más viento en la cara del usuario, y dependiendo de la escena, Birdly también tiene la capacidad de transmitir olores. Dicho de otro modo, Birdly crea un “feedback” directo para el usuario, combinando sonido, olor, y viento.
Birdly es un desarrollo de estudiantes estacionados en la Universidad Zürich de las Artes. La idea surgió a partir de un contacto entre sus responsables y la organización Birdlife, que estaba buscando proyectos para llevar a cabo una exhibición especial por su aniversario. El hecho de haber usado la primera versión del Oculus Rift perjudicó un poco la calidad final de la imagen, pero todos los que probaron al Birdly quedaron fascinados con el efecto físico. Existen planes para que Birdly llegue a dos exhibiciones en San Francisco y Vancouver, además de simulaciones adicionales. Birdly no será perfecto (el mareo en algunas personas es inevitable), pero hace un excelente trabajo a la hora de convertirte en un pájaro virtual.