Desde tarjetas madre de excelente calidad a esas pequeñas máquinas conocidas como netbooks que tomaron el mercado por asalto, Asus ha sabido mantener a través de sus productos, una posición de privilegio en el mercado informático. Hemos visto a Asus introducirse en diferentes campos, pero esta es la primera vez que el gigante taiwanés decide crear un superordenador de escritorio. Para que su sistema ESC 1000 pueda sostener ese título, dentro del hardware se encuentra nada menos que Nvidia, con sus poderosas tarjetas Tesla dedicadas al procesamiento general basado en chips gráficos, más conocido como GPGPU. Sin embargo, puede que lo de "super" no sea tan así como parece en realidad.
Una pregunta interesante sería saber para qué necesitaría un usuario promedio a un ordenador como el que ha presentado Asus. Puede que lo más descabellado de todo es que se le pueda dar cierta utilidad a un sistema como este en un hogar (desde jugar Crysis a 300 cuadros por segundo, hasta satisfacer las demandas de cada miembro de la familia virtualizando ordenadores), pero debido a las limitaciones del software de consumo general, el ESC 1000 de Asus tendrá mucha más utilidad para aquellos que necesitan realizar complejos estudios o simulaciones que demanden un poder de procesamiento inmenso. La gran mayoría de ese poder proviene del hardware creado por Nvidia, más precisamente hablando, sus tarjetas Tesla que son la raíz de la gran mayoría de los "superordenadores de escritorio" disponibles en estos días.
De acuerdo a las especificaciones, este pequeño monstruo cuenta con un procesador Intel Xeon W3580 de 3.33 Ghz de velocidad, unos más que interesantes 24 GB de RAM DDR3, un disco duro SATA II de 500 GB, una tarjeta de vídeo Quadro FX5800, y tres tarjetas Tesla C1060 que se encargan de la parte más dura del procesamiento gracias a sus capacidades y la implementación de la tecnología CUDA. Aún así, los números que aparecieron en la red no son consistentes. Según la mayoría de las publicaciones, este sistema puede alcanzar los 1.1 teraflops en precisión simple, pero el hardware revela algo diferente. Cada tarjeta Tesla puede alcanzar un pico máximo de 933 gigaflops en precisión simple, y sólo 78 en precisión doble. Sólo basta con multiplicar por tres estos números para notar que no concuerdan. Si se ignora a la tarjeta Quadro y a las capacidades del procesador, las tarjetas Tesla alcanzarían un máximo teórico de 2.8 teraflops en precisión simple, y apenas 234 en precisión doble, el primero excediendo por mucho a lo anunciado en la red, y el otro siendo apenas una fracción.
Por esta razón, puede que el título de superordenador no sea del todo adecuado para el nuevo sistema de Asus. Aún así, está muy por encima de lo que la gran mayoría de los usuarios tienen por ordenador en sus escritorios, incluso combinándolos a todos si poseen más de uno, y puede llegar a ser una herramienta muy útil para aquellos que necesitan mucho más que un simple ordenador. Claro que, la primera dificultad a superar con esta clase de sistemas es su precio. Asus no ha revelado el precio final que el ESC 1000 tendrá al público, pero se ha mencionado un "costo estructural" en hardware y software que está cerca de los 10.000 € por un período de cinco años. En otras palabras, será mejor que comiencen a guardar dinero si quieren uno de estos, aunque lo más razonable sería comenzar por una o dos Tesla C1060, que cuestan una fracción de ese monto.
