¡Bombazo! Otra noticia digna de los mejores Reyes Magos. Aunque el tema no nos pilla de sorpresa (había rumores), la importancia de la nota resalta en el panorama informativo. El gigante de la manzana por fin ha eliminado los DRM de las canciones del iTunes. Un paso enorme hacia un futuro que no conlleve este tipo de impedimentos absurdos para reproducir la música sin ataduras. Vaya fantástico mes de Enero que llevamos. El 2009 comienza potente.
Lo han anunciado en el MacWorld, convención anual del gigante informático. El DRM ha sido anulado con efecto inmediato y, probablemente, con carácter retroactivo. La clave está en un acuerdo entre Apple y las multinacionales Sony BMG, Universal y Warner. Con la otra gran discográfica, EMI, ya se llegó a un pacto de similares características en 2007. Apple ha sido la empresa que más música digital ha vendido en su tienda iTunes con la protección que limita su uso a quienes tienen el dispositivo iTunes o iPod y para colmo con un número limitado de copias. Un auténtico atentado contra la razón pues nunca se ha entendido el motivo de que tengamos que utilizar exclusivamente el iPod para reproducir unas canciones que hemos pagado con antelación. Tan absurdo e injusto resultaba este descalabro que Noruega le planteó un durísimo litigio. Sus autoridades exigieron la modificación de la tecnología para proteger los derechos de autor si el gigante informático quería seguir vendiendo canciones en el país nórdico. Algunos aseguran que éste ha sido el verdadero motivo que ha obligado a ceder definitivamente a los de San Francisco. Eso sí, Steve Jobs siempre ha cargado las culpas en las discográficas alegando que eran ellas quienes les obligaban a mantener las protecciones anticopia en sus canciones.
En definitiva, 8 millones de canciones que atesora iTunes se pueden comprar sin protección anticopia desde ayer. Y a partir de Marzo estarán disponibles otros 2 millones más de su catálogo. Aparejado a esto programan un cambio en las tarifas de iTunes(no podía ser todo tan bonito). Los precios fijos (antes 0.99 $) pasan a ser flexibles y las canciones de más éxito costarán 1,29 dólares (euros en Europa) y, por otro lado, habrá parte del inventario que quedará a 0.69 dólares/euros. Básicamente, los títulos que más venden serán más caros, y el resto de canciones que no se comercializan tan bien, abaratan su coste. Se podría llegar a una situación algo surrealista: descargar un disco completo podría llegar a ser más caro que comprar el compacto, con el añadido de no incluir carátula ni libreto, pero al menos no habrá que tolerar la estafa de la protección anticopia. Conste que serán las discográficas quienes fijen el precio tal como explican en la nota de prensa. Todo apunta a que en el nuevo trato la industria de la música ha impuesto aumentar los precios a cambio de ceder en la eliminación de esa lacra que es el DRM para la venta de música y que ni siquiera el líder del sector podía mantener ya. Un gran avance que puede suponer la erradicación generalizada de esta idiotez sin sentido llamada DRM. Como decía aquel, “un pequeño paso para el consumidor, pero un gran paso para la humanidad”.