Los hackers, esos personajes de película que buscan con sus acciones hacer que la información esté disponible para todo el mundo, vuelven a ser noticia. El grupo denominado “Anonymous”, famoso por haberle declarado la guerra a la cienciologia, ahora ha decidido que Australia es su enemigo. La decisión ha sido tomada por los hackers al conocer las intenciones del gobierno australiano de poner “filtros” que limiten el acceso a los datos por parte de sus ciudadanos. Lejos de la imagen popular que los muestra como una especie de delincuentes que se dedican a derribar servidores de grandes empresas o robar información, los hackers agrupados bajo el nombre “Anonymous” se han fijado como objetivo los integrantes de la ciencilogía, la pseudo religión que practican (entre otros) una buena cantidad de las estrellas de Hollywood. Es posible que esa pequeña “declaración de guerra” contra los acólitos de Tom Cruise les haya servido para hacerse más conocidos, pero la reciente declaración de hostilidades hacia el gobierno australiano demuestra que estos tíos realmente no se andan con chiquitas a la hora de elegir enemigo. Ocurre que en Australia han decidido implementar una serie de filtros -algo bastante similar a lo que hace el gobierno Chino- para limitar el acceso de sus ciudadanos a algunas páginas consideradas como “delicadas” por los que ostentan el poder del país. A pesar que desde el gobierno australiano se asegura que “el bloqueo solo será para frenar el contenido ilegal”, en Anonymous creen que la información (y el acceso a ella) debe ser libre y cada uno tiene derecho a elegir qué ve y qué no. En realidad, puede que tenga mucho más sentido meter en la cárcel a quienes generan contenidos adultos de ese tipo que utilizar un filtro para desentenderse del problema de fondo. Y, justamente, contra eso es que se revela Anonymous. Kevin Rudd, el Primer Ministro de Australia, es el responsable de impulsar esta polémica iniciativa. Esto lo ha puesto entre los primeros objetivos del grupo de hackers, quienes ya lograron derribar por espacio de una hora el servidor donde se aloja el sitio del mandatario. Lejos de quedarse cruzados de brazos, luego de constatar por las malas que el grupo hablaba en serio, el gobierno hizo un anuncio donde se menciona que “el grupo está mal organizado y ha cometido errores que podrán finalizar con su detención”. Parece que existen registros de las conversaciones mantenidas por los miembros del grupo en una sala IRC, aunque parece poco probable que un hacker se deje atrapar de esa manera. Como sea, esto es algo que recién empieza y de lo que veremos nuevas acciones en los próximos días. Para los que quieren seguir el asunto minuto a minuto, pueden visitar la página web en la que Anonymous difunde información sobre sus movimientos.
