La intención original de Microsoft era que las primeras versiones de prueba técnica de Office 2010 tuvieran su presentación oficial a mediados de julio de este año, pero sabiendo que aquellos privilegiados que asistieron al TechEd del lunes pasado tuvieron acceso a copias preliminares del software, era cuestión de tiempo para que aparecieran flotando en la red. Como la gran mayoría ya sabe, si hay algo que no le gusta a Internet y sus usuarios, es esperar. Las copias del Technical Preview salieron de entre las piedras, incluso con algunos enlaces de descarga directa viendo la luz, y más allá de las opiniones del gigante de Redmond sobre versiones filtradas, en pro de entregar la última información a nuestros queridos lectores, obtuvimos una copia y dimos una vuelta con Office 2010.
Ya es básicamente una cuestión de costumbre, el lanzarse a las oscuras profundidades de los torrents dudosos y las decenas de supuestas "versiones reales" sólo para poder obtener unas pocas imágenes y una impresión que puede quedar caduca dentro de un par de meses. El Preview Técnico de Office 2010 obviamente no ha sido la excepción. Varias de las versiones que pululan las redes p2p han sido "re-empaquetadas" con un pequeño troyano clavado como garrapata en el ejecutable de instalación, lo que nos recuerda una vez más que hay que tener mucho cuidado cuando algo se filtra. Probablemente, quien publicó la copia original no tenía la intención de dañar otros ordenadores o robar información, sino que tal vez quería compartir con los demás cuál fue su experiencia con el preview de Office, pero lamentablemente siempre hay algún pillo que quiere hacer de las suyas, obligándonos a permanecer alertas.
De esta versión sólo pueden obtenerse primeras impresiones, vistazos de lo que puede llegar a ser, porque no lo olviden, esto es un preview y ni siquiera puede ser considerado como una beta. Es más, el número de versión tal vez no sea igual al de la versión oficial que se publicará en julio. De todas formas, procedimos a la instalación que no presenta mayores problemas, si han lidiado antes con algo como la instalación de Office 2007. Apenas un contrato-licencia que nos recuerda que se trata de un preview (y que puede volar por los aires sin previo aviso), y un menú especial para personalizar la instalación (¿Por qué no pusieron algo así en Windows 7…?) y escoger componentes específicos. En promedio, la instalación completa de Office 2010 demanda 2 GB de disco duro, una cifra insignificante para los programas de hoy, pero una monstruosidad en comparación con las versiones anteriores de Office. Personalizando la instalación a un extremo, pudimos dejarla en 1.27 GB, sólo con Word, Excel y PowerPoint.
Un punto a favor que debemos rescatar de Office 2010 es su velocidad. La instalación demoró muy poco tiempo y la carga de los componentes resultó ser muy rápida, aún con un logo de arranque completamente animado para cada aplicación. Aquellos que le dieron la bienvenida a la interfaz Ribbon en la versión 2007 de Office estarán de para bienes con la versión 2010, ya que esta interfaz se ha extendido a cada una de las aplicaciones Office. Cada uno de los doce programas que vienen en este preview técnico de Office 2010 cuenta con alguna forma de interfaz Ribbon, y no existe posibilidad alguna de volver a la clásica interfaz que conocemos como "Wizard 97", disponible hasta la versión 2003 de Office. Algo parecido sucedió en Windows 7 con la eliminación del menú clásico, lo cual obliga a aquellos usuarios que se han resistido a ser un poco como los Borg, y deberán adaptarse ante las nuevas interfaces de Microsoft.
En lo personal, debo reconocer que la interfaz Ribbon en Office 2007 me causó una impresión muy mala. La curva de aprendizaje fue demasiado brusca para quienes utilizamos Wizard 97 durante la última década, y el encontrarnos que la gran mayoría de los atajos de teclado habían dejado de funcionar fue algo en extremo irritante. Sin embargo, la apariencia de Office 2010 no resulta tan chocante. Es como si alguien hubiera tomado un bisturí muy pequeño y hubiera hecho pequeños cortes, simplificando el diseño. Y definitivamente hay que destacar la remoción de ese espantoso círculo con el logo de Office. Ahora, los programas cuentan con un "icono/pestaña" mucho más sencillo y agradable a la vista, que posee un color diferente según la aplicación que se esté ejecutando. Al hacer clic sobre ese icono el usuario puede acceder a las funciones principales del programa como guardar y abrir documentos, enviarlos por correo electrónico e imprimirlos, y hasta acceder a las opciones de configuración. Algunos podrán decir que es "un paso atrás" respecto del simple menú en Office 2007, pero este nuevo formato está más en sintonía con Ribbon.
Otro detalle que debemos mencionar está basado en la integración que Office 2010 tiene en Windows 7. ¿Recuerdan cuando comentamos en el análisis del Release Candidate que varios programas podrían integrarse a la barra de inicio de Windows 7, ofreciendo opciones especiales al usuario a través de listas de salto? Bien, las aplicaciones de Office 2010 están dentro de ese grupo, y si el usuario lo desea puede "acoplarlas" a la barra de tareas para acceder a dichas opciones, como por ejemplo revisar la bandeja de entrada de Outlook. Obviamente, esto sólo estará disponible para aquellos que instalen a Office 2010 en Windows 7, un combo que es cada vez más sencillo visualizar, tal y como lo son Office 2003 con XP y Office 2007 con Vista.
Ya mencionamos que el rendimiento de Office 2010 al iniciar sus componentes fue bastante aceptable. Realizar una especie de benchmark sobre una preview técnica no es algo especialmente útil, pero de todas formas queríamos confirmar qué clase de consumo de memoria están necesitando los componentes principales de Office 2010. Los números no fueron necesariamente malos, aunque sí están un poco por encima de lo que vimos en Office 2007 frente a OpenOffice 3.0. Word 2010 se encuentra flotando entre los 40 y 41 MB de RAM con un documento en blanco, mientras que Excel necesitó poco más de 36 MB en la misma condición, y PowerPoint un poco por encima de los 38 MB. En estos días de ordenadores con varios GB de RAM en su interior, una diferencia de 8 MB en promedio puede no ser mucho, pero si tenemos en cuenta a sistemas como las netbooks (que muchas de ellas sólo cuentan con 1 GB de RAM), el contar bytes puede volverse una tarea necesaria.
Hasta aquí, poco más puede decirse sobre Office 2010. ¿Debes salir a buscar una copia e instalarla en tu sistema? En realidad, no. Es más, recomendamos que no lo hagas. La razón es muy sencilla: Esta preview técnica de Office 2010 vence en 30 días, actualmente no hay manera de activarla, y habrán pasado cómodamente los 30 días antes de que en mediados de julio aparezcan métodos válidos de activación. En otras palabras, es muy probable que la copia sea inservible antes de poder activarla. Sin embargo, si realmente deseas caminar sobre el fijo de la navaja y darle una probada, esta versión de Office 2010 cuenta con el sistema "Send-a-Smile", con el que puedes reportar problemas, críticas o comentarios positivos de forma muy sencilla. Si has decidido obtener una copia y darle una probada por tí mismo, creemos que sabes muy bien dónde buscar. De lo contrario, deberás suscribirte en la página de Microsoft, y con un poco de suerte podrás obtener una versión oficial en el mes de julio. Sólo nos queda algo por comentar: Teniendo en cuenta el tamaño de Windows 7, y los 2 GB de espacio en disco que demanda Office 2010, la combinación de ambos podría ser muy problemática para netbooks con discos SSD pequeños. Esperamos que el gigante de Redmond tenga este detalle en cuenta.