La fiebre informática sigue dando frutos y una de sus últimas novedades es el anuncio que dieron los ejecutivos de AMD en China. Allí, frente a un auditorio que clamaba por innovación, los ingenieros develaron tienen un proyecto para la próxima década con el cual intentarán hacer progresar cuantitativamente la eficiencia energética de los procesadores. Según establecen desde AMD, la eficiencia energética de los procesadores se incrementará 25 veces para 2020.
Requerida para una era tecnológica que nos proveerá de dispositivos minúsculos y vestibles, además de fundamentales para la internet de las cosas, la eficiencia energética de los chips y controladores está en constante evolución, con muchos grandes fabricantes trabajando en su favor. La eficiencia energética de las tecnologías de la información ha mejorado a un ritmo veloz desde el comienzo de la era de la informática, y las innovaciones en las tecnologías de semiconductores siguen abriendo nuevas posibilidades para una mayor eficiencia. Aprovechando este terreno fértil y comercialmente viable, AMD acaba de anunciar un proyecto que ya está en marcha para incrementar la eficiencia energética de los procesadores 25 veces, con una fecha estimada en la década siguiente.
Cuando se trata de mejoras de eficiencia energética, AMD muestra intenciones de ponerse al día con Intel y aumentar el rendimiento de sus procesadores para que las baterías de las notebooks puedan durar bastantes días, por ejemplo. Se sueña con procesadores de 1W y esta fantasía informática está basada en el concepto “race to idle”, que apaga porciones de un chip que no está en uso. AMD dijo que logrará su objetivo a través de mejoras en el rendimiento y la rápida reducción de la potencia en el uso típico de los procesadores. Aunque AMD se ha comprometido a ese objetivo, que no será una tarea fácil de lograr. Las mejoras de eficiencia ya no son tan automáticas como lo fueron en el pasado, cuando la reducción del proceso de chips resultó en mejoras constantes.
El panorama juega en contra también, pues a nivel mundial, tres mil millones de ordenadores personales utilizan más de uno por ciento de toda la energía consumida anualmente, y 30 millones de servidores utilizan un adicional de 1.5 por ciento de toda la electricidad consumida por un coste anual de $ 14 mil millones a $ 18 mil millones. Se espera que con el uso creciente de los dispositivos móviles combinados con el aumento de interés en el video y audio en la nube, estos números crezcan considerablemente. Allí, cuando todo haga bip y se conecte a internet, es cuando vamos a necesitar ser más eficientes. La carrera ya está en marcha.
Lo mejor de todo es que lo logró, mejoró por encima de 30 veces su eficiencia energética 😀