Se acabó el tiempo de experimentos y fases de prueba. Amazon Echo, el famoso híbrido entre altavoz inalámbrico y asistente virtual, abandonó su acceso vía invitación, y ya se encuentra disponible para todo aquel que lo desee. Amazon incluso decidió ajustar un poco su precio final con el objetivo de hacerlo más atractivo, y aunque vivir con Alexa plantea algunos desafíos adicionales, la respuesta general ha sido muy positiva.
Buscar información en la Web demandaba sentarse frente al ordenador hasta hace unos años. Hoy, lo más común es tomar el smartphone y hacer la consulta al asistente virtual integrado (Siri, Cortana o Google Now). Mañana, es probable que esa opción también quede en un segundo plano. Cuando Amazon presentó al dispositivo Echo en noviembre, muchos expresaron sus dudas. Los últimos proyectos de hardware habían mordido el polvo, y las finanzas no eran las mejores, pero existía el margen suficiente para un experimento más. Varios de los privilegiados que accedieron al Echo con una invitación especial reconocieron su potencial, siempre y cuando se lograra dejar a un lado los chispazos de frustración que causaba interactuar con Alexa.
A partir de febrero, las cosas mejoraron un poco. Amazon abrió las puertas de Echo a desarrolladores interesados, confirmando lanzamiento de un SDK en versión beta. Con su promoción a producto definitivo, el Amazon Echo se convertirá en una plataforma mucho más interesante para los creadores de software, intención respaldada a través de un fondo de 100 millones de dólares, un nuevo preview para el SDK, y la liberación sin costo alguno de los servicios de voz que posee Alexa a fabricantes externos, por lo que es muy probable que Amazon Echo no sea el único accesorio de su tipo en el futuro cercano. Las inversiones de Amazon también nos dan una idea de la clase de plan que se ha preparado para Echo. En un caso, se trata de una compañía que diseña plataformas inteligentes para coches, y en el otro, sistemas de seguridad hogareños controlados por voz.
El nuevo precio oficial para el Amazon Echo es de 179.99 dólares, y su disponibilidad general se activará el próximo 14 de julio. Imagino que la primera barrera entre los usuarios internacionales será el idioma. Amazon no dio ningún detalle sobre el soporte futuro para otros idiomas, y si bien logra resistir los acentos más pesados, el inglés es la prioridad aquí. ¿Acaso quiero uno? Honestamente no lo sé. Mi relación con los servicios de Amazon es casi nula, e imagino que muchos usuarios están en la misma situación. Al mismo tiempo, el Amazon Echo no deja de ser un producto de primera generación, y esperar un poco más no parece una mala idea.
