Lisandro Pardo
Una vez más, la ciencia y la moda se cruzan con resultados bastante… extraños. Con el potencial suficiente para ocupar un lugar en las pasarelas del futuro, el concepto de Algaculture nos habla de una “simbiosis” entre el ser humano y las algas, basándose en un traje especial que genera comida derivada de algas, utilizando dióxido de carbono y un poco de energía solar.
Aquellos que estén familiarizados con el trabajo de Frank Herbert deben recordar bien lo que es un destiltraje. Todo personaje que quisiera sobrevivir a la hostilidad de Arrakis debía ser tan eficiente en la recuperación de agua que ni siquiera el aliento era desperdiciado. Aún así, un destiltraje no es más que un sistema de filtrado, refrigeración y reciclado. Lo que tenemos hoy aquí es un traje que genera comida. ¿De dónde viene? Sus diseñadores Michael Burton y Michiko Nitta lo crearon pensando en una simbiosis entre el ser humano y las algas. Existen muchos platos típicos y productos comerciales que tienen algas entre sus ingredientes, pero en Algaculture, la relación va mucho más allá del simple consumo. Desde cierto punto de vista, lo que proponen a través del traje es una especie de “semi-fotosíntesis” con la que una persona sería capaz de alimentarse mientras realiza sus actividades diarias.
Una serie de tubos colocada frente a la boca y la nariz del usuario recogen el dióxido de carbono, que es trasladado a las algas en el traje (estimulando así su crecimiento), y el resto del proceso se completa con la exposición del usuario a la luz del sol. Una de las demostraciones del traje se llevó a cabo en septiembre del año pasado durante la Digital Design Weekend, con la asistencia de una cantante de ópera. El “rendimiento” del traje fue más que interesante: Produjo las algas suficientes para comer tres veces al día, y los visitantes tuvieron la oportunidad de probar el alimento. Lamentablemente, no hay reportes sobre el “sabor” de la mezcla, ¿pero te imaginas en una relación casi permanente con algas, accediendo a una fuente de alimento estable a cambio de tu aliento y la luz del sol?
Bizarro!
En mi opinión creo que éste invento está basado en la mítica historia de la máquina de Maná. (Manna Machine). La cual fue utilizada según la leyenda para alimentar a los israelitas en el desierto.
Saludos.!
En estos momentos a mucha gente le parecerá extraño o innecesario, pero al llegar a un punto en el que la comida escasee o “escasee” (que no se reparta equitativamente, como hoy en día), tal vez no les parezca tan descabellado.