Si queremos recordar un juego específico que pertenece a la era de las consolas clásicas, el camino más efectivo para hacerlo es descargar un emulador. Como alternativa, muchos entusiastas han colocado emuladores en línea, logrando simplificar considerablemente el proceso de configuración, ¿pero qué tal si alguien decidiera crear una consola online, que trabaje sobre el navegador? Bienvenidos al proyecto AirConsole.
Una de las ideas más interesantes con las que me he cruzado en los últimos meses es la de convertir a un Raspberry Pi en una consola de emulación multiplataforma. También están aquellos que decidieron crear una cabina dedicada con palancas y botones reales, lo que da lugar a reproducciones de máquinas recreativas muy bien logradas. Por supuesto, no necesitas nada de eso para disfrutar de un clásico. Con el emulador promedio y una copia del juego en cuestión (zona gris si las hay) tienes garantizadas horas y horas de entretenimiento, y si por algún motivo no deseas descargar más software, no te preocupes: En estos días es posible encontrar emuladores en línea (con ayuda de módulos externos como Java), o los fabulosos Console Living Room y The Internet Arcade de Archive.org.
Otra opción similar y a la vez muy atractiva es el proyecto AirConsole. En esencia se trata de una consola virtual a la que se accede directamente con el navegador, y convierte a un dispositivo móvil compatible en su control principal. Cuando ingresas a la página por primera vez, AirConsole presentará un código. Luego visitas esa misma página desde tu smartphone, ingresas el código anterior, y con esto las sesiones quedarán enlazadas. Actualmente, AirConsole ofrece seis juegos: Tic Tac Boom (una especie de clon del Bomberman), Hit Parade (una extraña mezcla entre arcade y jardinería), Quick Minds (preguntas y respuestas), Pad Poker (el nombre lo dice todo), Air Shields (disparos), y PolyRacer (carreras).
Puede que ese repertorio parezca un poco débil, pero AirConsole tiene algo más para entregar, y es un emulador NES integrado. Todo lo que debemos hacer es arrastrar una imagen ROM a la ventana del navegador, y dejar que la consola virtual se encargue del resto. AirConsole es compatible con dispositivos Android (cuanto más moderna la versión, mejor) e iOS, y la presencia del smartphone es obligatoria, o de lo contrario no podrás controlar nada.
