Si piensas que ya hay demasiados proyectos inspirados en Google Glass y el Oculus Rift, deberás tener paciencia, porque la legión sigue avanzando. En esta oportunidad, nos cruzamos con i-Air Touch, unas gafas que combinan contenido virtual en tres dimensiones y rastreo de movimiento.
Las últimas novedades sobre el Oculus Rift se han encargado de derribar la “noticia” de que el esperado headset sería compatible con dispositivos iOS, cuando en realidad, el desarrollo del Rift en plataformas móviles está siendo orientado hacia Android. En cuanto a Google Glass, el dispositivo de Mountain View está a punto de cambiar su diseño incorporando un pequeño auricular mono, y una mayor compatibilidad con gafas recetadas. Aún así, la respuesta de fondo sigue siendo “no”: Los detalles específicos sobre sus respectivos lanzamientos no están en ninguna parte. Esta demora da oportunidades adicionales a otros proyectos de enseñar algo igual, o incluso mejor, de lo que prometen Glass y Rift por separado.
Uno de los ejemplos más recientes es i-Air Touch, desarrollado por el Instituto de Investigación de Tecnología Industrial en Taiwán. i-Air Touch adopta el formato de gafas, y genera una imagen 3D virtual aproximadamente treinta centímetros frente a los ojos del usuario. Eso convertiría a i-Air Touch en una simple pantalla 3D portátil, pero hay más: En su parte superior se instalaron cámaras con el objetivo de rastrear los gestos del usuario, permitiéndole interactuar con las imágenes virtuales como si estuviera utilizando una pantalla táctil física, a un extemo tal que los gestos más comunes sobre pantallas táctiles son compatibles en i-Air Touch. Un aspecto crítico para esta clase de gadgets es el de la batería, pero i-Air Touch logra reducir su uso desactivando el sistema de rastreo cuando los dedos del usuario no se encuentren dentro de un rango establecido entre 28 y 32 centímetros frente a las gafas. El siguiente paso es obviamente miniaturizar su diseño, pero la idea no parece ser comercializar a i-Air Touch directamente, sino licenciar su tecnología a otros fabricantes.